pamplona - El poeta y escritor Rafael López de Ceráin (Pamplona, 1964) falleció ayer por la tarde en el Complejo Hospitalario de Navarra, donde permanecía ingresado a causa de una enfermedad provocada por un tumor de riñón.

Licenciado en Derecho, articulista y ensayista, dedicó su vida a la que fue su pasión: la poesía. Rafael López de Ceráin estudió Derecho en Pamplona (Universidad de Navarra), donde realizó además algunos estudios de Ciencias Políticas. En Madrid siguió formándose -Master MBA- y obtuvo sus primeros trabajos. Su obra poética se halla antologada en el volumen Seguro es el pasado (2006) y, además, es autor de ensayos y artículos recogidos en Las rutas de Antonio Machado (2002), El perplejo encadenado (2003), Cavilaciones (2006) y el libro de ideas poéticas 101 adagios (2006), entre otros títulos. Entre sus obras más recientes, la que presentó el año pasado en la librería Walden de Pamplona, Cuestiones varias (Sahats); Escritos de vapor (Cyan), que recopiló sus textos en prosa en 2015, o en ese mismo año, el poemario Camino negro, Camino verde (Renacimiento). Versos de otoño (Sahats, 2014), Apuntes de esto y aquello (Sahats, 2013) o Mitologías y regresos (Sahats, 2009) son otras de sus obras publicadas.

Rafael López de Ceráin inició su relación con la poesía de niño, disfrutando de los versos de Antonio Machado -uno de sus referentes- que su padre le leía y él aprendía de memoria. Comenzó a escribir de muy joven, como un acto “muy personal”, según recordaba en una entrevista en 2013. Fue en 1996 cuando se decidió a publicar su primer libro de poesía, Trabajos de amor disperso. En ese momento, tras haber pasado anteriormente una larga estancia en Nueva York, estaba ya de vuelta en Pamplona y era concejal de CDN del Ayuntamiento, siendo Javier Chorraut alcalde de la ciudad. El segundo poemario fue Olvidos y presencias, presentado en Madrid, y desde entonces no cesó su dedicación a la poesía, alumbrando poemarios cada vez más concisos, más profundos, donde volcó problemáticas personales y universales. “La poesía es uno mismo. Es inteligencia, sensibilidad. Es un amanecer, porque es una forma de abrirse”, dijo López de Ceráin en alguna ocasión. - P. Etxeberria