pamplona - En mayo del pasado año comenzó a gestarse un ilusionante proyecto en la vieja Iruña, la Orquesta Ciudad de Pamplona (OCP). Una aventura que, tras muchas diatribas y horas de ensayo, tendrá hoy su plasmación real; es decir, su debut. Y lo hará nada menos que en el Teatro Arriaga de Bilbao, poniendo música a la ópera infantil Cuento de Navidad y de la mano de Ópera de Cámara de Navarra (OCN) y la Asociación Bilbaína de Amigos de la Ópera (ABAO). En total ofrecerán cinco funciones, hoy y mañana en doble sesión, 12.00 y 18.00 horas, y el día 5 en sesión matinal (12.00 horas).
Izaskun Úcar, presidenta de la Orquesta Ciudad de Pamplona, explica que “somos un grupo de músicos que nos hemos formado en los conservatorios bien de Navarra o del extranjero pero que tenemos como nexo de unión la zona de Navarra, País Vasco y La Rioja. Con edades entre 30 y 38 años, contamos una plantilla fija, el núcleo digamos, de entre 8 y 10 músicos, que se amplían dependiendo del proyecto. Por ejemplo, en Bilbao estaremos 21”.
En cuanto al origen del proyecto, Úcar apunta que “somos músicos que hemos tocado juntos muchas veces pero bajo diferentes nombres, hasta que vimos que había una necesidad clara de orquesta de este tipo en Pamplona, puesto que, por ejemplo, se cuenta con formaciones similares de fuera de Navarra para diferentes proyectos que se realizan aquí. Llegados a este punto, quisimos darle un nombre y una entidad más seria para que la Comunidad Foral pudiera tener, al margen de la Sinfónica de Navarra, otra orquesta que para hacer esas cosas a las que la OSN no llega, con músicos profesionales y con la máxima calidad que ofrecemos”. Esos proyectos a los que se refiere Úcar se han multiplicado en los últimos años en Navarra, son conciertos atípicos, bien por su formato bien por la producción en la que están integrados. “Son proyectos diferentes. Tenemos muy claro que la OSN hace muy bien su papel pero quizá no puede llegar a hacer ciertas producciones con asociaciones o de tamaño más pequeño que nosotros sí podíamos abarcar, como música de cámara o de cuerda; y, repito, con la máxima calidad, porque no somos amateurs, somos gente que se dedica profesionalmente a la música. Eso sí, nos encantaría poder abarcar todos los formatos porque somos muy versátiles y la intención es adaptarnos a las circunstancias en las que podamos encajar mejor ”.
Un proyecto de estas características necesita, lógicamente, de una financiación. “De momento, el tema de las subvenciones lo estamos viendo, ya que en Navarra, para poder acceder a las ayudas que concede el departamento de Cultura, necesitas tener una antigüedad de dos años, y la OCP no la tiene. Hasta el momento hemos optado al sello MECNA (que posibilita el acceso al mecenazgo), también intentaremos patrocinadores privados y nos presentaremos a todas las ayudas que vaya surgiendo”. Úcar detalla que la OCP ya se ha reunido con Félix Palomero, director gerente de la Fundación Baluarte y de la OSN, para “decirle que nosotros no queremos quitarle el sitio a nadie, sino crear un proyecto que hiciera compatibles a las dos orquestas. Quedamos cordialmente y a la espera de que quizá, en algún momento, si encaja, poder tocar en la sala de cámara de Baluarte”.
Y es que arrancar un proyecto de estas características no es nada fácil, de ahí lo encomiable de la tarea que están llevando a cabo estos músicos. Sin ir más lejos, necesitan de un lugar para ensayar: “De momento nos hemos ido apañando entre un local que nos ha dejado el Concejo de Egüés y lo que hemos ido tirando cada uno de nuestros contactos con escuelas de música, por ejemplo”.
En resumen, la filosofía de la Orquesta Ciudad de Pamplona es muy clara, dar salida a los músicos profesionales forjados o vinculados, principalmente, a Navarra. “Tras acabar los estudios musicales superiores, después de tantísimos años estudiando, te encuentras con que no puedes optar a una orquesta profesional, algo que está muy difícil. De esta forma, ahora queremos apostar por un proyecto de futuro que se nutra de todos estos músicos”, finaliza Izaskun Úcar. Aunque la OCP no cuenta con un director titular, en los conciertos que ofrecerán hoy y mañana en Bilbao la batuta la llevará Jesús Echeverría.
El espectáculo. Se trata de una ópera infantil de setenta minutos de duración que traslada al espectador al Londres victoriano para mostrar la historia de Ebenezer Scrooge, un hombre avaro que durante una fría Navidad y tras recibir la visita de tres fantasmas del pasado, presente y futuro se convierte en un hombre bueno y generoso. La música, compuesta está compuesta por Iñigo Casalí. Scrooge es interpretado por Alfonso García-Noáin; junto a Carlos Crooke, Marta Infante y Enrique Sánchez Ramos como los fantasmas Bob, Bell y Fred, respectivamente. Junto a ellos, y el resto de solistas, actuará la Orquesta Ciudad de Pamplona, los Coros adulto e infantil de OCN y los alumnos de la escuela de ópera OCN, que encarnan el Coro de Indigentes Fantasmas y el Coro de Niños.