donostia - Una de las estampas de este año ha sido la de las enormes colas en los pases de prensa.

-A partir del día 8 habrá que pensar en todo lo que no hemos hecho bien. El festival ha crecido mucho. El planteamiento que hacemos de programación de pases de prensa y acreditados ya no vale. El apartado de industria en siete años ha crecido en 1.000 acreditados. Eso pasa por habilitar más salas para prensa y acreditados, pero no las tenemos, habrá que quitar algunas sesiones de público. Habrá que buscar un equilibrio. Más sesiones para prensa y acreditados implica menos espacio para el público. Ha habido casi 4.000 acreditados.

Siendo un festival tan popular, esa decisión puede no ser compartida por la ciudadanía.

-Cuando tienes un cargo de dirección tienes que tomar decisiones que no van a gustar a todo el mundo; hay que asumir las repercusiones. El primer año puede que haya quejas pero al cuarto, igual es mejor para todos. Hay que estudiarlo, no hay nada decidido. Pero está claro que hay que cambiar cosas.

¿Cuál ha sido la cifra de público?

-Parecida a la del año pasado o, quizá, un poco por encima. En entradas creo que ha habido 200 menos. Estamos hablando de más de 100.000 vendidas. Es cierto que se han adquirido un poquito menos, pero también ha habido menos sesiones. Ha habido un poco más de asistencia por sesión. El año pasado fueron 174.000 y entre esa cifra y 2.000 más habrá este año. Solo quedan sitios en sesiones de las retrospectivas y poco más.

También ha habido un aumento de acreditados por blogs.

-Los tiempos están cambiando. Es como el tema de los influencers; la gente pregunta por qué se permite que estén. No son vasos excluyentes. ¿Es la manera que a mí me gusta? Igual no, pero no solo podemos dar espacio a lo que creemos que es idóneo. Informan de otra manera y llegan a otra gente. Además, dentro de los blogueros hay algunos muy buenos y me encantan.

¿Cree que a la larga, la buena relación con Toronto, que hace que las estrenos mundiales sean allí y las europeas en Donostia, puede llegar a pasar factura y que la crítica internacional no venga?

-Se ha creado un circuito y para algunas películas Toronto-Donostia es una muy buena opción. Aquí también ha habido estrenos mundiales como Alpha, the right to kill, de Brillante Mendoza. Pero los estrenos mundiales en los festivales me parece lo menos interesante. Cada vez va a haber más circuitos: Venecia-Telluride, Toronto-Donostia-Zurich-Londres, Sundance-Berlín... Van a quedar dos o tres festivales de premieres mundiales, que van a ser Cannes, Berlín y Venecia, los demás vamos a jugar de otra manera. Nos interesa mucho más descubrir películas que acoger un estreno mundial. Me parece más interesante descubrir con Toronto Lady MacBeth o Blind Spot, que tener una gran película que días después se va a estrenar en salas comerciales. - H.F.