barcelona - El rey del reguetón J Balvin y la reina del neoflamenco Rosalía son los cabezas de cartel del Primavera Sound, un festival en el que las músicas urbanas, latinas y afroamericanas destronan este año al pop y rock indie que ha dominado durante dos décadas, en “un paso adelante hacia el futuro”.

Alberto Guijarro, codirector del macrofestival que se celebrará en el Parc del Fòrum de Barcelona desde este jueves, 30 de mayo, hasta el 1 de junio, defiende este “giro estilístico en un año decisivo” en el que el Primavera “da voz a la música urbana” y apuesta por “un cambio generacional”. “Cambio estilístico, nuevas generaciones y paridad de géneros va ligado”, añade, en referencia a un cartel en el que la presencia de mujeres es superior al 50%. “Aumentar el número de mujeres de la programación es una apuesta decidida del festival, pero lo ha facilitado el cambio generacional, porque las nuevas generaciones son más igualitarias y en las músicas urbanas hay más mujeres que en el rock”, sostiene.

el nuevo punk El viraje del Primavera tiene su reflejo más claro en el nuevo escenario, por el que desfilarán 17 artistas seleccionados por el trapero Yung Beef. Pero también es muestra de ello la presencia de Solange, James Blake, Kate Tempest, Maria José Llergo, Janelle Monáe, Princess Nokia, Future, FKA Twigs, Kali Uchis, Erykah Badu y el rapero Nas.

Aunque los clásicos del festival siguen teniendo su parcela y ahí estarán Suede, Interpol, Tame Impala, Primal Scream y Jarvis Cocker. “El ADN del festival no se ha perdido - asegura Guijarro-, porque los nombres históricos siguen estando en el cartel, junto a los representantes de la actualidad, como hemos hecho siempre. Hay que saber de dónde venimos y a dónde vamos”. “La actualidad cambia y nuestra voluntad es reflejar cómo los tiempos evolucionan”, de ahí la importancia que da el festival a las músicas urbanas, “que son el nuevo punk”. El cambio estilístico que el equipo de programadores del festival ha levantado ampollas entre el público indie y las críticas han corrido en las redes, pero Guijarro está convencido de que “son pocos que hacen mucho ruido” y no tiene intención de prestarles atención. - Efe