Fue el pasado mes de noviembre cuando la escritora y periodista gasteiztarra Karmele Jaio -colaboradora, además, de DIARIO DE NOTICIAS- publicó su última novela, un Aitaren etxea elegido como Premio Euskadi de Literatura en Euskera 2020.

Después de lo que todos estamos pasando desde marzo a causa del coronavirus, ¿Aitaren etxea

-No lo sé. Todo lo que estás viviendo cada día, en cada momento, te influye a la hora de escribir. Todo lo que te va pasando, lo que ocurre a tu alrededor en la sociedad, influye, inconscientemente muchas veces, en lo que haces. He escrito algo durante el confinamiento, por ejemplo, y sí que he notado que tenía los sentimientos más a flor de piel o que era más consciente de que lo que le afecta a uno nos afecta a todos. No es solo una cuestión de este virus, porque, en realidad, nos influyen otros virus y otras enfermedades que, a veces, no nos llevan al hospital. Pero sí, creo que seguramente lo que estamos viviendo estos meses hubiera tenido influencia en el libro si lo estuviera haciendo ahora.

Más allá de las dudas que tenía al principio, cuando el libro se publicó, lo cierto es que Aitaren etxea

-La verdad es que no ha podido funcionar mejor, eso es verdad. El Premio Euskadi es una guinda muy importante, pero es cierto que desde el principio siempre he recibido mucho feedback de los lectores y las lectoras. Ha sido una cosa increíble, gente escribiéndome, parándome por la calle... y personas que han leído el libro, no que te dicen: te he visto en el periódico, que has publicado esto o lo otro. Y muchas personas me han comentado que se han visto en este momento de la historia o en ese otro. Y ha habido muchos hombres que se han visto reflejados, que es algo diferente con respecto a otras veces. Por ejemplo, ha habido varios que me han dicho que se han emocionado con la relación entre el padre y el hijo, de ese no poder hablar de determinados sentimientos entre dos hombres. Por eso puedo decir que con este libro me he sentido muy acompañada frente a la soledad que viví en el momento de la escritura. Fue salir el libro y sentirme muy, muy acompañada. Además, luego ha venido la publicación en castellano, encontrarme con lectores de muchos sitios, otros galardones, ahora este premio... y eso está siendo muy emocionante. Pero lo más valioso, por lo menos para mí, es que venga alguien y te diga: me he visto aquí, entre estas páginas.

Con Amaren eskuak, el libro dio el salto a la gran pantalla. ¿Le gustaría que pudiera pasar lo mismo con Amaren eskuakAitaren etxea

-(Risas) No estaría mal, la verdad. Podría ser. Me gustaría porque, además, es bonito ver cómo de algo que has hecho tú, nace otra obra desde otros ojos y con otra aportación. Así que, por supuesto, me encantaría que volviera a suceder. / Foto: