Lo cotidiano y su trascendencia centran la nueva exposición del proyecto Artea Oinez, que acoge el Palacio del Condestable (salas 1 y 2) hasta el 28 de abril. Con más de un centenar de obras de 85 artistas, la muestra es un recorrido amplio y diverso que da cuenta de la pluralidad de manifestaciones de vanguardia de la escena vasco-navarra. Este año, la cita rinde homenaje a Lorea Alfaro García, artista y profesora universitaria en la UPV-EHU y antigua alumna de Lizarra Ikastola, organizadora del Nafarroa Oinez de este año.

El concepto que aúna las obras expuestas este año, el leitmotiv de la muestra, es lo cotidiano y su trascendencia, que provocan reflexión y pensamiento crítico. El repertorio de las obras refleja propuestas contemporáneas en disciplinas como la escultura, esculto-pintura, pintura, dibujo, instalación, grabado, vídeo, fotografía, impresión digital y las técnicas mixtas. La mayor parte se encuadran en la corriente abstracta, aunque también están representados el arte figurativo, expresionista, hiperrealista, simbolista, informalista... El espacio artístico se ha abierto también a las últimas tendencias del arte y a propuestas de jóvenes artistas.

El director de Cultura e Igualdad, Jorge Urdánoz, el director de Lizarra Ikastola, Josu Sueskun Cabasés, y el director de la Federación Navarra de Ikastolas y comisario de la exposición, Josu Reparaz Leiza, han presentado este viernes la muestra y han agradecido "el entusiasmo y la generosidad" de los artistas participantes, en una época tan complicada por la pandemia de la covid-19, que provocó el pasado año la suspensión de todas las actividades relacionadas con el Nafarroa Oinez 2020. Tras su paso por Pamplona, la exposición se podrá visitar también en el Museo Gustavo de Maeztu de Estella.

Las contradicciones del mundo contemporáneo

Unas botas katiuskas verde esperanza, flexibles, hechas para el trabajo, para el juego y el disfrute, pero rellenas de cemento y por lo tanto rígidas e imposibles de usar; carros de la compra que aluden al capitalismo y al problema de la bulimia, al querer adquirir de modo compulsivo cosas que luego inmediatamente se desechan; esculturas poéticas hechas de objetos encontrados en paseos; reflexiones sobre presencias y ausencias a través del cuerpo; la importancia de los balcones y de la oportunidad de asomarse a la naturaleza en esta pandemia; o críticas sobre la intervención del ser humano en su entorno natural.

Todo esto y mucho más encontrará el visitante en el recorrido que propone Artea Oinez 2021, que apuesta un año más por la cultura y el arte de vanguardia gracias al trabajo y a la generosa participación de un grupo de artistas que, con sus obras, ayudan a desvelar la realidad de nuestro tiempo.

"Invito al público a que, en esta sociedad líquida en que vivimos y en la que la inmediatez es la clave, se detenga un rato a disfrutar con cierto sosiego de lo que los artistas han querido transmitirnos con sus obras", ha dicho Josu Sueskun, director de Lizarra Ikastola, quien considera "un privilegio" la oportunidad de acercarnos a estas creaciones que, asegura, "estimulan nuestros sentidos, contribuyen al desarrollo de la educación y alimentan la imaginación" de quien las contempla.

Entre otros, participan en esta exposición, que exhibe además en vitrinas materiales de archivo de Lizarra Ikastola vinculados con su apuesta por aunar arte, creatividad y educación, creadores como Faustino Aizkorbe, Pello Azketa, Néstor Basterretxea, Carlos Cánovas, Eduardo Chillida, Miren Doiz, Txaro Fontalba, Asun Goikoetxea, Carlos Irijalba, Ana Mari Marín, Xabier Morrás, Txuspo Poyo, Marijose Recalde, Juan Sukilbide o José Luis Zumeta.

De los 85 artistas, 36 son navarros y navarras, la mitad de ellos mujeres. Y se han incorporado este año 11 nuevas firmas, 7 de ellas de artistas mujeres.

Homenaje a Lorea Alfaro García

La edición de este año quiere rendir “un humilde pero sentido homenaje” a la artista Lorea Alfaro García (Estella-Lizarra, 1982), antigua alumna de Lizarra Ikastola, “poseedora de una luz especial que hacía esperar de ella un porvenir brillante en el terreno de la cultura y del arte, tal como el tiempo y su trabajo han confirmado”, ha destacado Josu Reparaz. "Es un honor para nosotros poner en valor el trabajo de esta artista, la más joven de todos los creadores a los que se ha homenajeado en la historia de Artea Oinez", añade.

En 2005, Lorea Alfaro acabó su carrera de Bellas Artes y comenzó a experimentar con lo cotidiano para crear su discurso, por medio de la forma y la imagen.

Sus primeros trabajos exploraban el campo de los anhelos, examinando aspectos del proceso comunicativo que tienen que ver con la persuasión, la seducción y la introspección, en una búsqueda de significados, de emociones y recuerdos. En 2006 fue la ganadora del concurso Pamplona Jóvenes Artistas organizado por el Ayuntamiento de Pamplona. Ha expuesto su obra en el Museo Gustavo de Maeztu, en la Sala Rekalde de Bilbao, en Artium en Vitoria-Gasteiz, en el Guggenheim, en Madrid, en Pekín o en Gante. Y es también una de las habituales artistas colaboradoras de Artea Oinez.

En sus últimos trabajos, expuestos en el Museo Oteiza, Tabakalera o la Fundación Miró de Barcelona, donde precisamente este mismo viernes ha inaugurado exposición, Alfaro mimetiza los mecanismos de producción visual propios de la moda, de los gestos privados y públicos, trabajando en grandes soportes de papel publicitario y plástico o vídeo, acentuándolos con un dardo preciso, dirigido a las formas de distribución y del consumo desaforado de la imagen.