El próximo 22 de octubre llega a Baluarte Ximur (Arruga), el musical creado e interpretado por alumnos y alumnas de ESO de Jaso ikastola. Con un reparto de chicos y chicas entre 12 y 16 años, Ximur contará con dos pases: uno matinal, que acogerá a más de 1.400 escolares, y otro el mismo día a las 19.00 horas abierto al público general. Las entradas para este espectáculo en euskera y con apoyo impreso en castellano, pueden adquirirse tanto en las taquillas de Baluarte como en su página web.

El espectáculo invita a la reflexión, sensibilización y acercamiento sobre el Alzeheimer y nuestros mayores, tratando la enfermedad desde una perspectiva de teatro musical.

"El musical es divertido, lleno de emociones, canto, baile, acrobacias y efectos especiales. No ha dejado indiferente a nadie en otros auditorios dentro y fuera de Navarra", explica Imanol Janices, profesor en Jaso Ikastola y uno de los directores del proyecto.

El espectáculo se ha representado en este 2021 con gran éxito de público en escenarios de la talla del Victoria Eugenia de Donostia, Auditorio de Barañáin y en Tudela. Además, como pase especial, el grupo realizó una representación exclusiva en los jardines de la Casa de Misericordia para sus residentes.

"Este 22 de octubre el reto de Baluarte es apasionante y un gran colofón de nuestra gira. Esperamos hacer lleno en los dos pases, pero necesitamos un último empujón en la venta de entradas. La motivación es máxima y el auditorio es un gran premio para todas las personas implicadas", apunta Janices.

Ximur es el noveno musical de Jaso Ikastola. Cada edición se integra una temática social y este año trata la sensibilización hacia el cuidado de los mayores y las personas con Alzheimer.

Dirigido por Imanol Janices (profesor de Educación Física), Irantzu Zabalza (profesora de Primaria) y Eva López de Lahoz (ex alumna), Ximur traslada en 1 hora y 35 minutos una propuesta educativa innovadora en euskera. Además, está creada íntegramente por el alumnado que participa, desde el guión, las canciones, coreografías, como escenografía, vestuario y diseño de sonido e iluminación. "La idea de esta edición surgió durante el confinamiento cuando muchos de los participantes experimentaron cómo sus familiares y allegados de edades más avanzadas quedaban asolados por la pandemia, y esto derivó en la necesidad de sensibilizar al público sobre una enfermedad tan común como el Alzheimer", explica Janices.