Como una invitación a olvidarse de la pandemia y a desconectar. Así se inauguró ayer la octava edición del festival Pamplona Negra, con una breve intervención a cargo de su directora, Susana Rodríguez, quien invitó a “dejar la realidad fuera y todo lo malo en la puerta, para disfrutar de la fiesta de la novela negra, de los escritores y del crimen”. Rodríguez, quien recordó que éste es un festival pensado para que disfruten su público, dio así el pistoletazo de salida a una edición que se desarrollará hasta el 22 de enero.