Las y los editores de la Alianza Internacional de Editores Independientes acaban de presentar la Declaración de Pamplona-Iruñea, con la que reivindican "una edición independiente, comprometida con nuestra sociedad, el medio ambiente y la humanidad". El manifiesto ha sido presentado tras los Encuentros Internacionales de la Edición Independiente, organizados con la colaboración de la Asociación de Editores Independientes de Navarra (Editargi) y que se celebraron en Pamplona entre el 23 y el 26 de noviembre de 2012. De ahí que el título de la declaración esté vinculado a la capital navarra.

En dicha declaración, las y los editores reafirman su compromiso con el carácter cultural, social y político del libro y la lectura; la democratización del libro en nuestras sociedades; y la lectura como práctica liberadora que potencia ciudadanas y ciudadanos críticos y partícipes de la comunidad de la cual son parte".

Según apuntan, entre las preocupaciones actuales está "la cada vez mayor concentración que se da en el sector editorial", junto con "las desigualdades estructurales que marcan el mundo del libro". De ahí que, como editoras y editores, insistan en que "la edición independiente tiene como vocación resistir a la presión de la mercantilización continua en el mundo del libro".

los objetivos Por todo ello con esta declaración presentada desde la Alianza Internacional de Editores Independientes se comprometen firmemente a trabajar en favor de "reafirmar el significado cultural, social y político del libro" y asimismo "promover la bibliodiversidad desde una perspectiva decolonial, ecológica, feminista, libre, social y solidaria".

Además, también apuestan por "apoyar la edición en lenguas minorizadas y/o minoritarias", a la par que "trabajar por una ecología decolonial, social y geopolítica del libro".

Por otro lado, también buscan "reforzar el carácter social y solidario del trabajo con el libro, el que consideran un bien común". Para ello se propone "un precio justo para los libros, adoptar ingresos equitativos para las y los autores y las y los editores; y procurar que las diferencias entre las menores y mayores remuneraciones entre las y los trabajadores sean lo más reducidas posible".

Se buscará promover "prácticas que contribuyan a la protección del medio ambiente", como son imprimir en el país donde se trabaja, limitar las tiradas y evitar el uso de plástico. Se tratará de "fortalecer la libertad de expresión y la equidad de expresión" y por último se consolidará la Alianza como "dinamizadora de nuestra red de solidaridad en la defensa de estos objetivos".