Oier Zuñiga: “El teatro es algo mágico, es un ritual que se da aquí y ahora, cuando está ocurriendo la función”
La obra de Fernando Bernués, ‘El rey tuerto’, llega mañana a Olite con las actuaciones de Txori García Uriz, Iratxe García Uriz, Leire Ruiz, Ion Barbarin y Oier Zuñiga
Desde su estreno el pasado 28, la coproducción de Inextremis Teatro y Tanttaka Teatro ha recorrido distintos puntos de Navarra. El rey tuerto narra una historia sobre la fragilidad de las convicciones, la naturaleza de los roles sociales y la búsqueda de la verdad.
¿Qué se va a encontrar el público?
–Se va a encontrar una comedia con tintes de humor negro, una comedia social. Tiene mucho componente de teatro social, ya que trata un tema complicado, como es el del abuso de poder o la violencia policial. Creo que se va a encontrar con una obra que, a través del humor, intenta paliar un hecho trágico como es el que se narra. Pienso que la gente se lo va a pasar bien, pero también va a tener un espacio para reflexionar.
¿Cómo llegó a El rey tuerto?
–Fernando Bernués, uno de los directores artísticos de Tanttaka, había trabajado mucho con Leire Ruíz, miembro de la compañía Inextremis junto con Txori García Uriz, Iratxe García Uriz y yo mismo. Fernando tenía ganas de trabajar con una compañía navarra, ya que él es navarro de origen, a pesar de que vive casi desde niño en Donosti. A través de Leire Ruíz, Fernando le propuso este texto. Desde el principio nos gustó mucho, ya que es una comedia que está bien escrita y en la que no paras de reflexionar y reír. A partir de ahí, empezó el trabajo en común entre las dos compañías y se dio el caso de poder llevarla a cabo y convertirme en uno de los actores de este montaje.
¿ Qué sentimiento o mensaje se pretende transmitir con la obra?
–Creo que El rey tuerto tiene muchos mensajes y sentimientos que transmitir. Diría que el primero o el que más importancia tiene es que tenemos derecho a cambiar. Creo que ese es uno de los grandes late motivs de esta pieza, ya que muchas veces parece que nuestros valores, nuestra forma de pensar o nuestras ideas son inamovibles, estancas o que no se transforman. Nada más lejos de la realidad. Cualquier acontecimiento de nuestra vida, las relaciones que hemos tenido y que tenemos con el resto de personas que nos rodean transforman esas formas de pensar, esos valores, o al menos, pueden transformarlos. Pienso que esta obra es, especialmente, una invitación a que podamos cambiar esos errores o esos aspectos de nuestra forma de ser que quizá no son los más adecuados ni los más coherentes.
¿Qué es lo que hace que el teatro sea tan especial?
–El teatro es algo mágico, es un ritual que se da aquí y ahora, cuando está ocurriendo la función. Sucede en base a un convenio no tácito y establecido entre el público y los y las intérpretes. El teatro es poder abrir ventanas en nuestra realidad para poder comprender lo que nos rodea, como el resto de las disciplinas artísticas. Pero, quizás, el teatro tiene este componente de carne y de cuerpos y de acción en movimiento que nos hace vivir una situación, tanto cuando somos espectadores como cuando somos actores o actrices. Nos permite reproducir una situación y transitar en un viaje que nos ayuda a intentar entender lo que nos pasa.
Es el autor del cartel de esta edición. ¿Cómo ocurrió esto?
–La propuesta de hacer la imagen de la edición del festival vino del propio festival. Este año se estrena dirección nueva con Ane Pikaza y María Goiricelaya, y ellas querían darle un nuevo giro a la imagen del festival. Hasta ahora había sido otro tipo de gráfica, con fotos, más realista quizá. Querían explorar otras vías del diseño gráfico y la expresión comunicativa. Valoraron varias propuestas, de distintos artistas navarros y eligieron mi forma de hacer. A partir de ahí, hice dos o tres propuestas y trabajamos sobre un boceto que fue el que más consenso tuvo de parte del departamento de cultura.
¿En qué se inspiró para diseñar el cartel de este año?
–Hacer un cartel siempre es complejo, y más de un festival que lleva tantos años. Me inspiré en varias cosas. Por un lado, en mi experiencia en Olite, tanto de actor como de espectador. Olite y su festival son algo mágico, poder ver teatro a la luz de la luna entre esas paredes con tanta historia, ese castillo maravilloso… El festival es una experiencia muy mágica, por lo que el cartel tenía que reflejar también un punto de magia, de fantasía, y de esos mundos a los que nos lleva el teatro. Junto a ello, me apetecía hacer un pequeño homenaje a ese momento previo que sentimos las actrices y los actores antes de salir a escena, donde parece que se te viene el mundo encima. Es una sensación muy difícil de definir. En el cartel podemos ver a una actriz que, a través del telón, puede ver ese primer foco que se enciende justo en el momento en el que empieza la función. A partir de ahí empieza la aventura y empieza todo. Con esa luz se iluminan nuevos mundos, nuevas imágenes, nuevos cuerpos… podemos ver más allá de la actriz. Esas noches estrelladas, esa luna lorquiana… todos esos elementos me han hecho ir concretando esta imagen.
¿Qué le espera a la obra a futuro?
–A El rey tuerto le espera larga vida. Acabamos casi de empezar, el pasado 8 de enero. Desde entonces hemos podido visitar varios pueblos de Navarra a través del circuito Sendaberri, la red de teatros de Navarra. Todavía nos queda alguna función dentro de este programa. Más allá de eso esperamos llegar a más rincones de Navarra, vamos a ir a Hernani, y también esperamos pisar otros pueblos fuera de Pamplona y fuera de Navarra porque creemos que la propia obra lo merece, y nosotros también lo merecemos.
Temas
Más en Cultura
-
Qué hacer y qué ver en Navarra y en Pamplona: agenda cultural del 9 al 15 de junio
-
Javier Cercas, las ‘Historias de Gaza’ y la narrativa local lideran la V Feria del Libro de Navarra
-
Fotos de la feria del libro en la Plaza del Castillo
-
Navarra impulsa el programa Bibliotecas Humanas con 'libros' LGTBI+ en seis municipios