CONCIERTO DE ANDRÉS SUÁREZ
Fecha: 30/11/2023
Lugar: Teatro Gayarre
Incidencias: Concierto de la gira Viaje de vida y vuelta, el último disco de Andrés Suárez.
Andrés Suárez (voz, guitarra y piano), Marino Sáenz (violín); en algunas canciones les acompañó Miguel Sueiras (saxofón) y Leire Martínez (voz).
El último concierto de Andrés Suárez en Pamplona, en 2021, fue de los que se agradecen. Recién salidos de la parte dura de la pandemia, todavía con muchas restricciones sanitarias. En un entorno hostil, el gallego fue de los valientes que prefirió echarse a la carretera y ponerse al lado de su público cuando este más lo necesitaba. Entonces vino solo y ofreció un recital a guitarra y piano. Fue lo mejor que podía hacerse en aquellas circunstancias, pero el artista y sus seguidores se quedaron con una espina clavada y el jueves pasado pudieron, por fin, sacársela.
A pesar de que el público estaba un poco tímido, Andrés quiso conectar desde el principio. Ya en la segunda canción, Necesitaba un vals para olvidarte, lo interpeló para que cantase junto a él, cosa que hizo aún con cierta tibieza. “No se preocupen, verán como al final cantan hasta los acompañantes”, vaticinó. En la siguiente, Nuestra generación, se desgañitó gritando sin acompañamiento algunos de sus versos, de marcado carácter social (“Niños retratados en la guerra / muertos de hambre mientras comemos de más / igualdad entre el hombre y la mujer / siglo que viene, ¿cuánto te queda?”.
Le acompañaba un músico que tocaba los teclados, aunque en ocasiones los cambiaba por el violín. Fue el caso de la bellísima Teresa y Andrés, dedicada a sus padres. El escenario estaba totalmente desnudo, pero había varias hileras de luces que se iban encendiendo y formaban hermosos efectos visuales alrededor de los dos músicos. Y, como había augurado, el público se fue soltando y cantó bastante en Más de un 36.
Hubo varias sorpresas; algunas para los músicos, que improvisaron Si llueve en Sevilla, que no la tenían prevista, y otras para el público, cuando salió su viejo amigo Miguel Sueiras a tocar el saxo, y la pareja de este último, Leire Martínez (de La Oreja de Van Gogh) a cantar No te quiero perder. Hubo momentos de rabia y emoción desbordada (Todavía puedo oírte, dedicada a un amigo que murió de sobredosis) y pasajes de descomunal belleza (Voy a volver a quererte, con Andrés al piano y Miguel al violín).
Hubo, a fin de cuentas, esa magia que solo a veces se genera en las actuaciones en directo. La conexión total entre un artista que canta lo que siente y un público que siente lo que escucha. En el último tramo de actuación, el público se desató por completo y cantó a voz en grito piezas como Nina o Despiértame, y se puso en pie para bailar el reggae de Valientes, que está dedicada a una seguidora (ahora ya, amiga) de Andrés que padece la enfermedad del Párkinson. En los bises, que no fueron tales porque el artista optó por no hacer el paripé de retirarse a camerinos para luego regresar, puso la guinda con canciones como Tal vez te acuerdes de mí, No te quiero tanto o Perdón por los bailes. Al terminar, mientras se despedían entre aplausos, los músicos se mostraban exultantes y prometieron desde el escenario que no tardarían en volver. Seguro que muchos les tomaron la palabra.