Pelota vasca con eco flamenco
El Flamenco on Fire rindió este miércoles homenaje a cuatro familias de pelotaris gitanos navarros, en una celebración donde se entrelazaron dos tradiciones culturales: la vasca y la flamenca
"Ese sonido de la pelota en el frontis, en el suelo, ese clac que hace... si lo unimos y transformamos, puede convertirse en un ritmo, y ese ritmo puede entrar en lo que es el flamenco”, explicó Xabier Martínez, presidente de la Asociación Cultural Navarra de Pelota Vasca, Napike. Con esta idea como punto de partida, y en el marco del Festival Flamenco on Fire, se celebró ayer un emotivo encuentro entre la pelota vasca y el flamenco, con el objetivo de rendir homenaje a pelotaris gitanos y navarros y, al mismo tiempo, reconstruir y poner en valor la historia de la pelota en el mundo gitano.
Un homenaje emotivo
El evento, organizado en colaboración entre el Ayuntamiento de Pamplona, Napike y la Federación de Asociaciones Gitanas de Navarra (Gaz Kaló), marcó el inicio de una cooperación que pretende ir más allá del acto simbólico. Como explicó Martínez, el objetivo es que esta fusión entre pelota y flamenco se desarrolle “tanto a nivel musical como humano”, a través de proyectos comunes como la introducción de la pelota en centros escolares, siempre buscando tender puentes entre tradiciones que, aunque distintas en apariencia, comparten valores como el arraigo, la creatividad y la tradición oral.
La celebración cobró un significado aún más especial al coincidir con dos efemérides: el 600º aniversario de la llegada del pueblo gitano a la Península Ibérica y el 25º aniversario de la fundación de Gaz Kaló.
El homenaje tuvo lugar ayer a mediodía, en el frontón municipal de la calle Mañueta, un enclave cargado de simbolismo por ser el lugar de nacimiento de Agustín Castellón Campos, más conocido como el Maestro Sabicas, legendario guitarrista gitano nacido en Pamplona en 1912, figura clave en la internacionalización del flamenco e inspiración del Flamenco on Fire.
El acto comenzó con palabras de reconocimiento por parte de Xabier Martínez y Ricardo Hernández, coordinador de Gaz Kaló, quienes destacaron la importancia del evento y rindieron homenaje a cuatro pelotaris y familias de pelotaris gitanos que han dejado huella en los frontones navarros: Chichán, David Arbizu, Iban García y Abraham Antimasbeheres.
Hernández presentó el encuentro como “uno de los actos más emotivos del festival”, y así lo expresó el investigador Fernando Hualde, que destacó el legado gitano en la pelota vasca: “Cuatro nombres, cuatro historias, cuatro ejemplos de esfuerzo, humildad y talento. Porque si el flamenco ha sido el latido del pueblo gitano, también en los frontones navarros ha resonado ese mismo pulso. Allí, sin focos ni titulares, se ha escrito una historia gitana de entrega y dignidad que merece ser contada y celebrada, como lo hacemos hoy, con sano orgullo.”
Tras los discursos, los homenajeados recibieron una placa conmemorativa, una txapela y un pañuelo rojo, en señal de gratitud y visibilidad a su aportación o la de su familia al patrimonio cultural y deportivo de Navarra. También fueron reconocidos con una txapela los organizadores Xabier Martínez y Ricardo Hernández. La ceremonia concluyó con un poema dedicado a la pelota y al flamenco, que unió ambas tradiciones en un mismo latido poético.
Exhibición de pelota mano
El acto continuó con una exhibición de pelota mano protagonizada por Iban García y Abraham Antimasbeheres, joven promesa de tan solo 16 años, ambos miembros del club Lagunak Pilota de Barañáin. En un partido reñido, García se impuso con 15 puntos frente a los 9 de Antimasbeheres. El frontón, abarrotado, se llenó de aplausos y miradas curiosas de viandantes que se detenían a observar la emoción del juego.
Ambos pelotaris se mostraron profundamente emocionados. Antimasbeheres agradeció a las organizaciones el reconocimiento y deseó que el público disfrutara del evento. García, por su parte, elogió la iniciativa: “Es una forma preciosa de mostrar lo que es la pelota y el flamenco, y de darnos a conocer. Fusionar ambas culturas es algo muy bonito”. También tuvo palabras de elogio para su adversario: “Ha sido un gran partido, porque Abraham es un gran rival. Lo conozco desde niño y tenemos un vínculo muy especial”.
Concierto flamenco
El broche final del acto lo puso el guitarrista jerezano Domingo Rubichi, con una actuación sublime que conmovió a los asistentes. Su música fue el cierre perfecto para un evento que celebró la diversidad, el diálogo intercultural y el orgullo compartido de dos mundos que se reconocen en la autenticidad del otro.
En la calle que vio nacer al Maestro Sabicas, el eco de la pelota y el compás del flamenco se entrelazaron para escribir una nueva página en la historia cultural de Navarra.