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El proyecto 'Salaia' exhibirá películas que evolucionarán a partir de las emociones del público

En 2026 se colocarán en una sala de Golem cámaras de infrarrojos para ‘leer’ al público y adaptar los filmes en tiempo real

El proyecto 'Salaia' exhibirá películas que evolucionarán a partir de las emociones del públicoIñaki Porto

Durante décadas, Hollywood ha celebrado screenings o pases especialesprevios a los estrenos de las grandes producciones para conocer las reacciones del público y poder realizar, así, algunos cambios antes de su llegada a las salas. Ahora,Professor Octopuss Lab IA, laboratorio de inteligencia artificial de Navarra, ha creado una herramienta de exhibición, Salaia, que ofrece la posibilidad de adaptar las películas en tiempo real en función de las emociones del público.

El proyecto empezará a funcionar durante la segunda mitad de 2026 en una sala de loscines Golem Baionade Pamplona, donde se instalarán cámaras infrarrojas para leer las expresiones de los/as espectadores/as y modificar, a partir de esta lectura, el ritmo de la película, los diálogos o distintos elementos narrativos. Ninguno de los pases será igual que el anterior o el siguiente, como ya sucede en el teatro, creándose, de este modo, una especie de “cine efímero”. 

Carlos Fernández de Vigo explicó los axiomas de este modelo de inteligencia artificial disruptiva.

Innovación y competitividad

El nuevo modelo de proyección se dio a conocer ayer en un acto que contó con la participación del consejero de Industria y de Transición Ecológica y Digital Empresarial,Mikel Irujo, cuyo departamento ha respaldado el proyecto junto a Golem y a la empresa HP (Hewlett Packard). Professor Octopus, por su parte, cuenta en su seno con varias/os investigadoras/es de la Universidad Pública de Navarra, además de con ingenieros, abogados y, por supuesto, creativos. Y es que, como indicóCarlos Fernández de Vigo, director general del laboratorio ubicado en el barrio de la Rochapea, Salaia“no nace con vocación de sustituir a guionistas ni a directores”, ya que las películas evolucionarán en tiempo real a partir de las emociones del público, pero basándose en criterios artísticos establecidos previamente durante el proceso de creación del filme. 

Durante la presentación, Carlos San Julián, programador de Golem, integró esta propuesta en las distintas transformaciones tecnológicas que la exhibidora y distribuidora ha ido asimilando a lo largo de sus 43 años de existencia. Un tiempo en el que “siempre hemos estado atentos a mejorar la experiencia cinematográfica” del público.

EN DETALLE

  • Lo artístico como base. Professor Octopus Lab IA es el laboratorio de investigación creado por Carlos Fernández de Vigo y Lorena Ares, responsables, a su vez, del estudio Doctor Platypus y Ms. Wombat, desde donde ambos crean sus proyectos de animación y videjuegos. Platypus está formado por “científicos que desarrollan tecnología” para realizar las películas. Es decir, como apuntó Carlos Fernández de Vigo, “somos una productora de artistas que utiliza la tecnología para crear nuestros proyectos”. Propuestas que forman parte del sello Navarra Animation que ha dado frutos comoRobot Dreams o Cafunè, corto de Fernández de Vigo y Ares que ganó un Goya este año y actualmente se encuentra inmerso en su carrera hacia los Oscar. Próximamente, estrenarán Dinogames, además del corto Skizo. En ese sentido, ayer quisieron dejar claro que el contexto narrativo y, por tanto, creativo, irá por delante de todo lo demás.
  • Visión antropocéntrica. Fernández de Vigo explicó que los axiomas de su modelo de inteligencia artificial. En primer lugar, será una IA antropocéntrica, de modo que “cuando diseñemos, lo haremos pensando en el individuo, el equipo, la comunidad, la sociedad...” También se comprometen a cumplir con la legislación de la UE en materia de protección de datos y de propiedad intelectual, y a trabajar en “búsqueda de la no dependencia tecnológica de terceros”; en defensa de la soberanía del dato, y de una computación sostenible, estudiando modelos de energía acordes con la agenda 2030. También apuestan por una IA ética y a medida, y por la ciberseguridad.  
  • Estudio de neuroimagen. El estudio realizado por la catedrática Mónica Cortiñas con jóvenes y adultas/os, a los que se les ha expuesto a productos y narraciones básicas, ha arrojado resultados interesantes para Salaia. Por ejemplo, según apuntó Fernández de Vigo, el impacto fue un 43% mayor que el de un producto convencional; la memorización fue un 37,7% mayor, y el engagement, un 30,4% más alto. “Y no causa saturación”, concluyó.  
  • No se trata de sustituir. Carlos Fernández de Vigo quiso aclarar que este proyecto “no viene a sustituir a los guionistas y directores”. “Solo es un cambio de modelo”, ya que a Salaia hay que alimentarla de mucha información sobre los personajes y sobre cada elemento narrativo, así que “el trabajo de guión será mucho más exigente”.
  • Emociones encontradas. Cuando se produzca una situación de emociones encontradas, entrará en juego el criterio artístico y si el público objetivo no está reaccionando como se espera, se tomarán decisiones desde la producción.

Por su parte, el consejero Irujo destacó que en este proyecto “convergen el talento humano, la innovación y el desarrollo tecnológico”, elementos que se abren paso en el mercado. “La IA no es un fin en sí mismo, es un medio con unas posibilidades impresionantes” que hay que tener en cuenta “para hacer competitivas a nuestras empresas”, añadió.

De ‘Emotional Films’ a ‘Salaia’

Como recordó Fernández de Vigo, Salaia es una evolución deEmotional Films, proyecto presentado en 2023 que consistía en adaptar una película a las emociones de un único espectador en un entorno controlado. Sus resultados llamaron la atención en congresos, festivales y mercados de todo el mundo, adonde el director de Octopus y su socia, Lorena Ares, fueron invitados.

Y la tecnología fue comercializada en distintas líneas de negocio como el concierto-evento Bnet Vs. Bnet, en el que el campeón de freestyle se enfrentó a una IA. Ese desarrollo posicionó al laboratorio navarro a nivel estatal e internacional, y contó con la participación de la UPNA, la Universidad de Navarra, Creena, Aditech y Clavna, con el equipo científico del laboratorio privado.

En estos momentos, el modelo se amplía a toda una sala comercial, interpretando no solo el estado emocional individual, sino también el clima colectivo y otras variables de contexto como la geolocalización, el horario o la climatología, a través de un sistema de captación no invasivo (cámaras de infrarrojos).

Presentación de 'Salaia' en Golem.

Esta lectura servirá para adaptar la película, construida con una compleja arquitectura que incluirá unos 14 modelos de IA, “generando un doble motor emocional y narrativo que decidirá en tiempo real cómo generar cada escena, e incluso qué escenas generar. “El reto consiste en integrar esta modulación narrativa en un entorno real sin romper la experiencia cinematográfica”, señaló Fernández de Vigo, que subraya que Octopus es una entidad sin ánimo de lucro en la que se deposita “el conocimiento de inteligencia artificial que hemos acumulado durante ocho o nueve años”, de la mano de un equipo de 40 investigadoresmultidisciplinares (25 del laboratorio y y 15 de la UPNA). 

En el caso de Salaia, Mikel Galar, catedrático en el área de CiencIas de la Computación e Inteligencia Artificial de la UPNA, ha liderado el proyecto, que también ha contado con el trabajo de Mónica Cortiñas, catedrática de Comercialización e Investigación de Mercados, que ha realizado un estudio de neuromarketing, con jóvenes y adultos, con resultados muy interesantes que apuntan que, además del cine, las aplicaciones de esta herramienta pueden extenderse a sectores como el marketing, atención al cliente, turismo, educación, etcétera.