PREGUNTA: ¿Cómo ha ido este año del décimo aniversario? ¿Cómo lo ha vivido?
RESPUESTA: Ha sido un año muy especial, objetivamente ha sido el más intenso de todos los que hemos vivido, porque hemos intentado mantener la tensión y el interés durante los doce meses. Hemos hecho la exposición número 60, el catálogo número 130, el visitante 1 millón..., ha habido fechas redondas. En septiembre hicimos la reunión del Patronato, muy especial, porque ya hay 43 patronos y nos gustaría terminar este nuevo curso con 50...
P: Este 2025 la entrada ha sido gratuita, precisamente por el décimo aniversario. ¿Han atraído al número de visitantes que esperaban?
R: Sí, a más de lo que esperábamos; no pensábamos duplicar la cifra del año pasado. Este año natural estamos en 197.400 visitas, el doble del año pasado. Con la ayuda del Ayuntamiento de Pamplona, la entrada ha sido gratuita, y eso ha ayudado, se ha notado mucho en una mayor afluencia. En cuanto a espectáculos, llevamos ya 350. Y Amigos del Museo, estamos en 497, a punto de llegar a los 500.
P: ¿Cuántos Amigos del Museo son de Navarra?
R: La mayoría, el 88% son navarros. Luego, los internacionales, que es otro grupo de Amigos, ahora mismo suman 31 y queremos terminar el curso en 35. Es gente que apoya mucho el Museo económicamente, da entre 7.000 y 12.000 euros al año.
P: ¿Se ha logrado el objetivo de que el campus de la UN no viva de espaldas a la ciudad de Pamplona?
R: Sí, yo creo que más que nunca. Efectivamente ese era un objetivo muy importante, no sabíamos qué iba a pasar, y el museo lo ha conseguido. De hecho, al principio respondió bastante mejor la ciudad que la universidad. Me acuerdo del primer año, muchísima gente de la ciudad bajaba y la universidad casi te miraba más como que eso no tenía que ver con ellos. Ahí hemos ido tomando acciones, como crear un comité asesor con un miembro de cada facultad para que sepan lo que hay aquí, que sepan la programación con tiempo y puedan articular sus asignaturas en torno a cosas de las que hacemos, y de hecho ahí ha habido mucha innovación docente y muy variada.
P: Tener un teatro les garantizará atraer a públicos muy diversos.
R: Sí, hay muchísima diversidad. Es una gran ventaja tener el teatro, la programación de artes escénicas y música, porque eso hace que mucha gente venga, y cuando es danza son unos, cuando es música otros, porque es tan poliédrico... Al final todo es arte o conocimiento a través de la experiencia artística, pero es muy variado y cada uno sintoniza con unas de esas expresiones.
P: Se ha incorporado un nuevo director artístico, Gabriel Pérez-Barreiro. ¿Qué va a aportar?
R: Sí, Gabriel se ha incorporado ya hace un año a la dirección artística y se suma a Teresa Lasheras, ella más en artes escénicas y música, y él más en artes visuales, artes plásticas. Teresa conoce muy bien la realidad local y nacional. Y Gabriel, además de conocer lo nacional, conoce mucho lo internacional y especialmente Latinoamérica. Este museo tiene dos mundos que puede capitalizar y donde puede dar un servicio más claro: el mundo latinoamericano, donde se incluye España, y el mundo árabe, donde también se incluye España, porque el mundo árabe ve a España de un modo próximo, grato, familiar. Compartimos muchísimo. Yo cuando viajo a Emiratos me siento más en casa que cuando voy a Dinamarca. Hay una afinidad grande y esa es otra línea de trabajo que queremos desarrollar. Este nuevo director artístico es un auténtico talento que traemos a Navarra. En el MoMA estuvo en la creación del Centro de Estudios Latinoamericanos. Ha dirigido la colección de Patricia Phelps de Cisneros, montó la Bienal de Sao Paulo..., es un tipo muy potente y tenemos la suerte de tenerlo en Navarra. Y él quiere, prestando atención a lo local y desde tus raíces y cuidando primero a los tuyos, desde ahí, continuar con esa dimensión internacional.
“Me alegra ver que viene al Museo gente que jamás había pisado el campus y jamás quería tener nada que ver con esta universidad y el Opus Dei”
P: Tengo entendido que Pérez-Barreiro quiere potenciar la conexión con el público joven.
R: Sí, él quiere hacer una cosa muy importante que es ahondar en ese apellido del museo, que es museo universitario, ver qué significa, qué implica que sea un universitario. Investigar sobre eso, y sobre un tema que para mí es clave, que es la atención. Porque ha habido un secuestro de la atención en nuestra sociedad. Ahora las empresas más valiosas del mundo son Nvidia, Meta, Alphabet, Google, Apple, y son empresas cuyo trabajo tiene como contenido tu atención, que tú les dediques tu tiempo, que casi libremente trabajes para ellas y les vayas dando tu información y qué te gusta y qué no, y eso lo comercializan y lo monetizan. Eso ha tenido la consecuencia de que han secuestrado la atención de mucha gente, especialmente de la gente joven, que cada día son menos capaces de estar 40 minutos escuchando una clase, de atender lo que les dices... hay una especie de dispersión y de inmediatez de todo y de adicción a los likes, los tuits, Instagram... Y los museos adquieren aquí una actualidad muy grande porque son espacios clarísimos de atención, de contemplación y de interioridad. Nos gustaría poder crear una cátedra en la que investiguemos a fondo sobre la atención, sobre qué es un espectador. Tenemos la ventaja de que el 35% de los visitantes de este museo son jóvenes. Eso es un lujo, es la gente que va a tener el mañana en sus manos. Oye, ya que están aquí, vamos a intentar incidir positivamente en sus vidas.
P: Iniciaron una colaboración con el Ayuntamiento de Pamplona en 2022, con Enrique Maya en la alcaldía; la han renovado este 2025 con Asiron al frente del consistorio. ¿Esperan mantener ese convenio?
R: Sí, se prevé, confiamos que sí. Yo creo que estamos muy contentos todos de cómo está yendo y todos vamos en la misma dirección, que es atender la comunidad lo mejor que podemos y estar al servicio de ella. Creo que nos entendemos en esto. También con el Gobierno de Navarra, llevamos colaborando muchísimo y ahí son colaboraciones todavía más grandes. Mi experiencia es que la gente que está en política en el sector cultural tiene un clara vocación de servicio y no es difícil entenderse. A veces los problemas no son de entendimiento, sino de que tenemos unas estructuras de convocatorias, de burocracia, que dificultan mucho las cosas. Pero desde luego con Gobierno de Navarra, con Príncipe de Viana, con el Ayuntamiento, hay toda la voluntad de cooperar, y con los agentes culturales de Navarra privados también muchísimo.
P: ¿Se apoya lo suficiente el arte en Navarra desde el sector privado?
R: Hombre, a ver, nunca lo suficiente, hay países donde se apoya muchísimo más. A los patronos del museo, que son los que más se implican y ayudan con ideas, tiempo, con contactos y con dinero, les sorprende que no haya más navarros. Dicen: “pero vamos a ver, si esto es un servicio a Navarra...”, y también les sorprende que no haya más ayuda pública.
P: ¿Entre los patronos hay navarros?
R: Entre los patronos individuales no hay navarros, no. Hay empresas que apoyan, están la constructora Abaigar, Siemens Gamesa, Audenasa, pero navarros como patronos a título individual no hay. Y nos da pena, yo he de reconocer que me ha sorprendido. Aquí siempre se establece ese pulso, no sé, esa tensión público-privada que a mí siempre me ha costado entender, porque al final tú en educación lo que quieres es la mejor educación al menor coste posible y si eso te lo da un colegio privado o una universidad privada, oye, si es más eficiente con mis recursos, mejor. A mí que me den una buena educación aunque me cueste un poco, ¿no? Y con la cultura lo mismo.
“El aumento de visitas este año de entrada gratuita ha superado nuestras expectativas, se ha duplicado la cifra respecto al anterior”
P: ¿Qué futuro le gustaría para el MUN, cómo se lo imagina dentro de otros diez años?
R: Me gustaría verlo como un lugar donde se sigue investigando, donde se habla de grandes temas de un modo abierto, porque una universidad debería ser el lugar donde puedes discutir pacíficamente las ideas y expresar tu opinión. Esto, en una cultura de cancelación tan grande que tenemos, resulta que no dejan que pase, porque te cancelan, y te insultan... Y si una universidad es eso, ya un museo es eso al cuadrado. Es un lugar donde se debe poder hablar y no solo desde lo racional, también desde lo experiencial. Me gustaría ver este museo como un espacio que ayuda a la gente joven o a la sociedad del futuro, y que potencia todo lo que hay en Navarra. Somos una comunidad en general un poco desconocida y últimamente conocida por cosas negativas, y, no, los navarros somos gente seria y comprometida. Nos gustaría que el Museo sea un altavoz de lo que es Navarra. Y que esta gente tan internacional, tan buena, generosa e influyente que viene al Museo, sean embajadores de Navarra por el mundo.
P: ¿Cree que se han diluido prejuicios o el rechazo hacia el proyecto de parte de la sociedad por ser un Museo del Opus Dei?
R: Pues fíjate que creo que sí, se han diluido. Bueno, a mí me lo han dicho muchas personas. Me dicen: oye, esto no es lo que yo pensaba. Y yo les digo: Bueno, es que igual lo que tú pensabas no es... Yo creo que por los dos lados ha habido cambios. Nosotros mismos también hemos cambiado, al abrirnos de esta manera, al relacionarnos con gente tan variada, al trabajar con ellos y acompañar a los artistas en sus procesos creativos, al recibir su feedback, nosotros también hemos cambiado. Me parece que en las dos direcciones hemos vencido prejuicios o nos hemos abierto, y nos hemos aproximado más, nos hemos encontrado y enriquecido, y eso a mí me da muchísima alegría. Veo gente que viene al museo que jamás había pisado el campus, que jamás quería tener nada que ver con la Universidad de Navarra y con el Opus Dei. Y ahora te dicen: oye, programáis muy bien y yo vengo porque lo que estáis haciendo es chapó, es propio de Nueva York o Berlín. Y por otro lado nosotros también hemos arriesgado, hemos hecho cosas que a veces incomodan a algunos en la propia universidad y, oye, bueno, es que hay que dialogar, es que esto no tiene nada de malo, aprendamos, por qué no.
"A partir de ahora queremos trabajar de forma más regular con artistas plásticos locales"
P: ¿Qué objetivo se marca hacia la sociedad navarra el MUNde ahora en adelante?
R: Cara a la ciudad, que la respuesta ha sido muy buena, siempre hay mucho margen de mejora. Hemos hecho algo muy bonito que ha sido SociARTE; gracias al apoyo de la Fundación La Caixa ayudamos a entidades a que cumplan sus fines a través del arte. Ya hay 35 entidades y el programa va creciendo. Otra cosa que queremos hacer ahora más de lo que lo hemos hecho es atender el panorama artístico local. En artes escénicas y música lo hemos hecho bastante, colaborando con Teatro Gayarre, Orquesta Sinfónica, AGAO, Baluarte..., ahí estamos dando un servicio a la realidad local. Y en artes plásticas, aunque la colección es de María Josefa, que es una navarra, aunque hemos hecho cosas con Carlos Irijalba, Carlos Canovas, Isabel Baquedano..., queremos poner más el foco y que haya una programación más regular, o sea, anual, con artistas locales. Queremos trabajar con ellos de un modo más sistemático y formalizado.
P: ¿Se trabaja ya en alguna próxima exposición con artistas navarros?
R: Sí, tenemos una planteada, pero no hemos hablado todavía con ellos. Pero puedo adelantar que va a haber una exposición bastante importante sobre el arte en Navarra en la que tomarán parte muchos artistas vivos. También desde el programa de artistas en residencia Tender Puentes queremos prestar más atención a lo local, hacer más exposiciones con gente local, que nuestros alumnos del máster enfoquen sus trabajos al panorama local. Navarra es muy única. Tenemos pensada una exposición, pero no podemos contar mucho aún, porque en esta comunidad se dan unas cosas muy singulares que no se dan en otros sitios del mundo y que no se han contado.
“Ha habido un secuestro de nuestra atención por parte de la tecnología, y queremos investigar sobre eso desde las expresiones artísticas”
P: ¿No puede adelantar nada de las exposiciones que vendrán este 2026?
R: Puedo adelantar que mantendremos e incluso potenciaremos la parte de colección permanente. La colección de María Josefa estará siempre presente y queremos ir presentándola y viviéndola de un modo un poco distinto y muy en esa línea de la atención, la contemplación, la interioridad, la espiritualidad. Vamos a elegir un tema cada año en el que vamos a intentar que converja todo el talento intelectual que hay en la universidad. Adelanto que la exposición que haremos en septiembre de 2026 va a ser sobre la percepción de la diversidad a través del color. Va a ser algo muy atractivo para el público y que te va a hacer pensar porque tú entras en una sala que es verde y al cabo de un minuto la ves blanca. Es la percepción. Van a ser exposiciones de un gran tema y durante el año hablaremos de ese tema. Conviviendo con la colección permanente, claro.
P: Y en artes escénicas, ¿qué vendrá?
R: Pues mira, te voy a adelantar un espectáculo que va a ser impresionante y del que no hay un precedente, que se llama Algarabía. Estamos trabajando con Emiratos Árabes, con la Fundación Khawla de Abu Dhabi, y vamos a hacer un espectáculo de fusión de las dos culturas. Se va a estrenar aquí el 27 y 28 de marzo y en Abu Dhabi el 26 de abril. Será estreno mundial, va a estar la orquesta sinfónica de alumnos, también alumnos de las orquestas sinfónicas jóvenes de Emiratos. Van a viajar de aquí a Abu Dhabi para representarlo en el Teatro Real y es la unión, el encuentro de las dos culturas a través de danza, música, interpretación. Uno de los bailarines es Jesús Carmona, premio Benois de la Danza 2021. Va a plantear un encuentro en torno a las flores, porque algarabía es una flor muy sencilla y algarabía para nosotros es algo alegre, luminoso, divertido. Y es una palabra con raíz árabe. Va a ser un espectáculo impresionante.
