El Helvetia cae ante el Ademar en un 'quiero y no puedo'
león. Buen papel del Anaitasuna, pero derrota de los pamploneses en León ante uno de los clásicos de la Liga Asobal. El Reale Ademar no se dejó sorprender por un Helvetia Anaitasuna que resultó más complicado de lo esperado y que aguantó la primera mitad ante un rival que se presume como la alternativa a los dos grandes de España, Barcelona y Atlético de Madrid, y buscaba en su terreno no fallar para conseguir tres victorias en los tres partidos disputados.
El conjunto navarro no pudo dar la sorpresa, pese a que en la primera jornada de liga fue capaz de sorprender al Granollers y en León se le recibió con mucho respeto, puesto que cuenta con hombres experimentados como los laterales zurdos Paco López, que no tuvo su mejor día, y Javier Borragán, junto al central Rubén Montálvez, jugador que agrada mucho al técnico leonés, Isidoro Martínez.
Pero, al mejor nivel, el Reale Ademar es superior a día de hoy a un voluntarioso Helvetia Anaitasuna, que se desfondó por completo en la segunda mitad del partido, permitiendo a los leoneses irse claramente en el marcador. Sin embargo, diez minutos de pájara leonesa hicieron soñar a los navarros, que salieron a la cancha con mucha fuerza, comenzaron mandando y veían como el electrónico se disparaba a su favor con un 2-7 en esos minutos. Pero el Ademar despertó de su letargo, se asentó en defensa por primera vez en el partido y, a partir de aquí, comenzó a ir de menos a más para dejar sin opciones a un rival que causó una buena impresión, aunque eso no les exima de la derrota.
Además, tras esos minutos de incertidumbre local, al Anaitasuna notó ese regreso físico y mental de sus rivales y se le atascó el repliegue defensivo. Eso permitió que los leoneses empezaran a tomar diferencias en el marcador para poner las cosas en su sitio, truncando las ilusiones que había creado el conjunto de Pamplona. Sin embargo, tuvo que verse en muchas dificultades para que el Ademar ofreciera sus mejores momentos, al darle la vuelta al partido gracias a la gran defensa 5-1, que propiciaba cómodos contragolpes e impedía al Anaitasuna anotar más allá de un tanto en diez minutos. 8-1 de parcial y ventaja para el Ademar (10-8) a los 20 minutos. Una ventaja que ya no se apartaría de los leoneses, que se fueron al descanso con un 16-11 a su favor.
El Anaitasuna no quería despedirse del partido a las primeras de cambio y tras la reanudación volvió a hacerse fuerte en defensa para reducir las distancias (17-14). Pero, en esto apareció Stranovsky, que salió del banquillo para acabar por matar a los navarros con diversos contragolpes nítidos y elevar su cuenta goleadora hasta los cinco tantos y llevar el marcador al 21-15.
Nunca se rindió el Anaitasuna, ni siquiera cuando obtuvo su mayor castigo. Siguió insistiendo hasta que se le acabó el fuelle. La mayor frescura del Ademar y los distintos contragolpes con un efectivo Goñi impidieron todo atisbo de reacción para que el marcador no lograra bajar de entre los cinco y seis goles de diferencia, para finalizar con ese 31-25 a favor del Reale Ademar.