pamplona. Iñaki Astiz disputaba su segunda pretemporada con Osasuna cuando Ziganda le explicó con franqueza lo difícil que le resultaría sumar minutos en el equipo de su tierra. Entonces apareció en escena Jan Urban, que le ofreció plaza fija de central en el Legia de Varsovia, uno de los equipos punteros de la Liga de Polonia. Iñaki Astiz no se lo pensó, agarró el petate y se lanzó a la aventura. Cinco temporadas más tarde, y con dos Copas polacas en el currículo, allí sigue, peleando por un título liguero que se le resiste y por superar eliminatorias en la Europa League. La próxima, en febrero y ante el Sporting de Lisboa. Mientras tanto, aprovecha las vacaciones de Navidad para volver con los suyos.

¿Cómo acaba un zizurtarra en la Liga de Polonia?

Me lo propuso Jan Urban. Al principio fue un poco de shock, porque no sabes dónde vas ni cómo es el equipo. Pero en ese momento pensé que iba a ser una buena experiencia personal y profesional, me lancé y no me arrepiento para nada. Lo que uno quiere es jugar a fútbol, y si no se puede en casa hay que salir. La experiencia está siendo muy buena, y allí ya me siento como en mi segunda casa.

¿Se le hizo raro el cambio?

Llegué en junio, hacía muy buena temperatura, la ciudad tenía mucho verde y muchos jardines... y no me chocó. Me aclimaté rápido. El idioma sí era una locura, porque no entendía nada. Pero había gente que hablaba inglés, y Urban y un par de brasileños con los que podía hablar castellano. Además estaba Kibu (Vicuña), segundo de Urban, que también es de Zizur. Venía bien tener alguien cerca para hablar castellano, porque si no hubiera acabado loco. De todos modos, el primer año tuve muchas visitas, así que no es que estuviese mucho tiempo solo.

¿Le costó aprender el idioma?

Fue difícil porque hay muchas palabras raras, muchas consonantes, y los sonidos también son difíciles. Al principio aprendí gramática con César, un entrenador mexicano del filial que me ayudó mucho. Y ya con esa base, trataba de soltarme, hablar con la gente, leer un poco, ver mucho la tele... Ahora ya me defiendo y hablo bien. A veces incluso pienso en polaco, y no quiero, pero algunas veces me sale solo.

Tiene una bajera en Zizur con su cuadrilla... ¿Es un ambiente recomendable para un deportista?

Vengo dos veces al año, tampoco creo que haga mucho mal. Al final, es un sitio para juntarte con los amigos, porque a la PlayStation no se puede jugar en la calle. Cuando hace frío o está lloviendo, es un lugar de reunión perfecto para estar tranquilamente y charlar un rato. No es un sitio peligroso.

¿Usted es de PlayStation?

Los de la bajera juegan bastante, pero yo no suelo darle mucho, entre otras cosas porque soy muy malo. El otro día estuve jugando, perdí 2-1 y dije que ya no jugaba más.

¿Cuántos de sus amigos le han visitado en Varsovia?

Han venido bastantes, sobre todo el primer año, porque se supone que iba a estar solo ese año cedido. Pasaron amigos de aquí, mi novia de entonces, que también vino varias veces, mi hermana, mis padres...

Se convertiría en un buen guía turístico

Pues sí, cada vez que venía alguien tocaba recorrer lo mismo unas cuantas veces. Pero mientras fuera con buena compañía, encantado de dar una vuelta y enseñar Varsovia.

¿Qué les enseñaba?

Sobre todo la parte vieja, que es muy bonita. El 80% ó 90% de la ciudad fue destruida. Hay museos que merecen la pena sobre la guerra. Está todo muy bien explicado. Les enseñé el palacio Wilanów, un parque junto al Estadio donde iba el Rey, la calle peatonal Nuevo Mundo, con muchas tiendas y terrazas para tomar algo... Alguna vez también fuimos a Cracovia, que es una maravilla, a unas famosas minas de sal cercanas, o al campo de concentración de Auschwitz.

¿Impresiona mucho?

Sí, pero fui en verano, y el hecho de que hiciera sol y calor ayudó a que no fuera tan fuerte como podría haber sido con todo gris, frío… hubiera impresionado más.

Pasemos a un tema más amable: ¿Qué tal es la fiesta en Polonia?

Hay bastante ambiente, porque a Varsovia y Cracovia va mucha gente de Erasmus. Cuando han venido amigos ya han aprovechado. Yo siempre andaba con partidos y no he podido salir mucho con ellos, pero más de uno comentaba lo guapas que eran las chicas, y alguno no sé si habría pillado... Sé que trajeron historietas que contar, pero esas ya se quedan entre nosotros.

Usted también 'pilló'...

Sí. Estuve con una chica de Zizur mucho tiempo, pero era muy difícil por la distancia y no pudo ser. Después, en una cena con amigos en Varsovia conocí a una chica… y hasta hoy. Ya llevo tiempo con ella y de momento la cosa va muy bien.

Las polacas tienen fama de guapas.

(Rotundo) Sí. Hay de todo, como en todos lados, pero ya se sabe que en el este de Europa hay chicas muy guapas. Pero bueno, hay que valorar muchas cosas al margen de que sean guapas o no. Y en mi caso estoy muy contento.

¿Se vive bien en Varsovia?

Sí. Es una ciudad grande que tiene de todo, con mucha diversidad cultural. Hay exposiciones, teatros, y muchas actividades y conciertos, también de gente española, organizadas por el Instituto Cervantes. Se vive muy bien y encuentras todo lo que puedas necesitar.

¿Tan bien como para quedarse cuando acabe su carrera?

Cuando termine con el fútbol me gustaría volver aquí. Nunca sabes qué va a pasar, pero en principio esa es mi idea.

De hecho, se ha comprado un piso en Zizur

Me lo han dado estos días, y estoy contento porque además tengo a todos los amigos viviendo al lado, en el sector Ardoi. De momento estoy con los padres, porque cuando vengo suelo estar en el pueblo. Además, el piso todavía está vacío. Por no haber no hay ni luz ni agua.

¿Allí ha engañado a alguien para echar partidas de mus?

Jugaba sobre todo al principio, cuando venían amigos míos o de Kibu, pero ahora menos. Allí son más de póker. Yo sé jugar, pero no me gusta tanto como el mus o la pocha. Solo juego cuando vuelvo aquí, lo que pasa es que llevo tanto tiempo sin practicar que no huelo una. He perdido magia.

¿Se alimenta bien en Polonia?

Las comidas son distintas, pero como soy de comer de todo tampoco tengo mayor problema. Aunque cuando vengo aquí en Navidades sí aprovecho la comida de la madre y la abuela. Es otro tipo de cocina, otros cortes de carne y diferente forma de hacerla. Ellos casi siempre toman sopa de primero, y después un plato que lleve un poco de todo, con carne o pescado y verduras. Aquí sopas las justas. Somos más de ensaladas, legumbre o verduras.

Lo que sí hacen bien es la cerveza

La cerveza allí es como el agua. Eso de los 0,3 centilitros no lo manejan. La más pequeña es de medio litro, y se las meten dobladas. De par de mañana no es raro entrar a un bar y encontrarte a alguno dándole. Yo no soy muy cervecero, pero cuando viene mi madre siempre quiere ir a echar cervezas. Le gustan bastante. Son un poco más suaves que aquí y entran más fácil. Te sacan tu medio litro, y tienes para un ratico.

¿Dónde sacude con más fuerza la crisis?

Yo diría que aquí, porque el porcentaje de paro es muy alto. Hablas con amigos y ves que en las empresas están echando gente cada dos por tres. Allí también falta trabajo, pero no se nota tanto ni se habla tanto de despidos.

¿Cómo es un día normal en la vida de Iñaki Astiz?

Me levanto a las nueve, voy a entrenar, suelo comer en el club y vuelvo a casa a mediodía. Descanso un rato, miro un poco las noticias por internet y, depende del tiempo, salgo a dar una vuelta o a algún centro comercial con la novia o amigos. Después ceno y poco más. Un poco de tele, alguna serie y a dormir.

¿Ve la tele polaca o tira de series por internet?

De las dos. Veo alguna serie polaca a la que me enganché con la novia, y también sigo bastantes en versión original, como Juego de Tronos o Dexter. De España no veo mucho. Sé que están todos enganchados a Águila Roja, pero no la sigo. Y eso que también la echan allí.

Dice que suele ir al centro comercial. ¿Le gusta vestir a la moda?

No me gusta mucho ir de compras. Voy al centro comercial sin más, a dar una vuelta, tomar algo o quedar con amigos. Pero ir de compras no me va mucho, y menos si voy con la chavala. A ella sí le gusta. Yo puedo ir un rato con ella, pero si estoy más de una hora ya me canso.

¿Dónde está celebrando estas fechas festivas?

El 24 en Muruzábal, en casa de mi madre. Y la Nochevieja toca en el pueblo de mi padre, Añorbe.

¿Y después sale por Pamplona?

Hace unos años sí. Pero al final, estás cenando en el pueblo, tienes que coger el coche, quedarte en Zizur a dormir, al día siguiente volver al pueblo para la comida de Año Nuevo... y todo sin dormir mucho. Por eso, los últimos años nos hemos quedado en Añorbe.

¿Y en Pamplona se disfrazaba o era de cotillón, discoteca y traje?

Siempre he sido de disfraz y para lo viejo a dar una vuelta. Nunca he ido a un cotillón. Pero los últimos 4 ó 5 años me he quedado en el pueblo o he bajado a Puente la Reina, que también suele haber ambiente y la gente se disfraza. Esa costumbre no existe en otros lados y está bien.

¿Son peligrosas las comidas navideñas para un deportista?

Es como todo. Un deportista sabe que se tiene que cuidar un poco. Yo nunca he tenido problemas de ponerme a zampar como un capullo y luego llegar con sobrepeso a entrenar. Tengo un plan de entrenamiento, hay un límite de peso… De todos modos, se puede comer de todo, pero de una forma moderada. Sin empapuzarte. Y no tienes por qué estar todos los días zampando hasta hartarte. Si un día te pasas, al siguiente un poco de verdurica para limpiar el cuerpo y ya está.

Su familia se verá contenta de tenerle por aquí en estas fechas.

La abuela es la que más sufre que esté fuera. Cuando hablo por teléfono con ella siempre me pregunta cuándo voy. Tiene ganas de ver al nieto. Solo tiene dos, uno muy cerca y yo un poco más lejos. Estos días paso más tiempo con ella, y se le ve contenta. Me intenta convencer para que me quede diciéndome qué bien se está aquí, que buena comida, no te dará pena irte... vamos, lo que es una abuela. Pero también está contenta de saber que estoy muy bien allí.