pamplona. Koldo Alberdi, Javier Ibáñez, Pablo Eguaras, Reyes Navarro y Nerea Beriáin son los responsables de este proyecto, que en menos de un mes ha conseguido movilizar a casi 100 chavales en las dos primeras excursiones programadas desde septiembre, cuando el grupo echó a andar. Un inicio más que prometedor para estos dinámicos jóvenes, que ya tienen sobre la mesa una extensa lista de actividades y un montón de buenos proyectos que esperan poder llevar a buen puerto. "No queremos ser un club basado en las excursiones de los domingos. Queremos hacer más cosas: cursillos de iniciación y otros de alpinismo, orientación o escalada; travesías en verano, viajes y expediciones, lo que se pueda", comentó Alberdi.

A la primera salida (peña Izaga) acudieron 20 personas, la mayoría, chavales de 4 a 12 años; a la segunda fueron el doble. "Somos gente joven que nos gusta la montaña y las actividades que allí se pueden realizar, y consideramos que en los tiempos que corren es una actividad apta para todos los bolsillos", indicó Pablo Eguaras.

En menos de un mes les ha dado tiempo de casi todo. Están celebrando estos días la primera semana de montaña de Ansoáin, que hoy contará con la proyección de un vídeo de la alpinista corellana María Pérez. El sábado tendrán una jornada muy especial, ya que la prueba inaugural de la II Copa Navarra de escalada, que organiza la Federación Navarra, va a su territorio, al rocódromo de Idaki de Ansoáin, para lo que se han preparado a fondo. El domingo tomarán parte en la carrera popular a San Cristobal que organiza Anaitasuna.

Dada la escasez de recursos públicos destinados al ocio y al deporte, los responsables de la Antsoaingo Mendi Eskola son conscientes de que su mayor fuerza reside en la excelente acogida que entre mayores y pequeños ha tenido la iniciativa. No es fácil encontrar a gente joven que quiera dedicar su tiempo y sus experiencias a los demás, pero ellos tienen claro que su objetivo prioritario es llevar el conocimiento de la montaña al mayor número posible de personas.

"Los cursillos serán asequibles a todos y los gastos los hemos reducido al mínimo. Por ejemplo, en las excursiones tenemos que tirar de los coches de los padres de algunos de los participantes", relató Javier, el veterano del grupo. Ya tienen más de 20 socios y creen que en breve contarán con muchos más.