Apenas una semana después del inicio de los Juegos Olímpicos, la natación individual femenina ha hecho historia. Tras cinco días de competición, la sudafricana Tatjana Schoenmaker cumplió todos los pronósticos al colgarse la medalla de oro, la primera para su país en Tokio, además de mejorar en casi un segundo el récord mundial en los 200 metros braza. Schoenmaker ya rozó el récord durante las pruebas preliminares a los Juegos y las semifinales de los mismos, pero fue en la última jornada de la competición cuando consiguió la marca de 2:18,95 que le llevó a lo más alto del podio.

Además de establecer una nueva plusmarca olímpica y mundial, Schoenmaker se convirtió en la primera mujer en bajar de la marca de los 2:19. Hasta el momento, el récord pertenecía a la danesa Rikke Moller Pedersen, que lo fijó en 2013 con un tiempo de 2:19,11. La sudafricana también se colgó la plata en la prueba de los 100 metros, disputada el pasado domingo.

La que ya fuera subcampeona del mundo en 2019 llegó a la final olímpica junto a su compatriota Kaylene Corbett. Aunque durante la prueba su rival más inmediata fue Lilly King. La estadounidense destacó por su fuerza como competidora, tal y como pudo comprobar la campeona, que vio cómo la norteamericana le aventajaba en 41 centésimas al llegar al ecuador de la prueba. Pero la fortaleza de la sudafricana en la parte final acabó con la resistencia de King, que aunque no dejó de pelear hasta el último instante, no consiguió superar a Schoenmaker. La sudafricana consiguió escaparse hasta las 97 centésimas de distancia de la norteamericana, que siendo la vigente campeona mundial en distancias más cortas como los 50 y los 100 metros, consiguió la plata en los 200. La medalla de bronce se la colgó Annie Lazor, también estadounidense, con una marca de 2:20.84.

Los de Tokio son unos Juegos especiales para Schoenmaker. No participó en la edición de Río cuando tenía 19 años. De hecho, no lo hizo ninguna nadadora sudafricana. Eludiendo las proposiciones que le llegaron de la natación universitaria estadounidense, Schoenmaker no quiso dejar atrás a su país ni entrenador y ha crecido deportivamente junto a sus compatriotas. Se convirtió con el oro conseguido en el 200 braza en la segunda campeona olímpica sudafricana de la historia de la natación. Su compatriota Penny Heyns hizo lo propio durante los Juegos de Atlanta en 1996.

El de Schoenmaker se convierte en el tercer récord mundial femenino conseguido estos Juegos. La delegación china se proclamó campeona en la final por equipos de 4x200 metros libres, donde mejoró en un segundo la mejor marca mundial. Las australianas se llevaron el oro en la prueba de 4x100 metros libres mejorando su propia marca, establecida en 2018.

MUJERES

200 braza

100 libre

HOMBRES

200 espalda

200 estilos