Con el punto ante el Sinfín aún en los labios, el Helvetia Anaitasuna afronta ya un nuevo compromiso liguero que le llevará este sábado cerca, hasta La Rioja. Allí se enfrentará a partir de las 19.00 horas en el Palacio de los Deportes al BM Logroño, rival inmerso en competición europea y que en la Liga vive un momento dulce al encadenar cuatro victorias que le han aupado hasta los puestos nobles, donde luce 18 puntos.

Un poco más abajo, a seis de su oponente y con un partido menos, se encuentra un Anaitasuna al que se le está acumulando el trabajo tras superar el parón obligado por la covid, pero que está respondiendo con mucho mérito. Venció al Ademar hace una semana en casa, el miércoles rescató un punto de su visita a la cancha del Sinfín -uno de los dos choques aplazados- y este sábado buscará seguir en la línea positiva en Logroño, a pesar de la dificultad de la empresa.

Con algunos jugadores recuperando aún su nivel tras la enfermedad, y con la lesión de piezas clave en el esquema como Antonio Bazán, Carlos Chocarro o la ya prolongada de Ander Torriko -a quien es posible que pronto se le vuelva a ver jugando-, hay quien está acumulando muchos minutos sobre la pista. Por ello, el sistema de rotaciones que establezca Domínguez será fundamental en un choque de alta intensidad como el que se prevé contra el BM Logroño La Rioja. La velocidad en el juego, sus rápidas transiciones, y el ritmo alto que impone el conjunto de Velasco casa muy bien con un Helvetia que también apuesta por la fluidez en el juego.

Con un plantel de calidad, en las filas riojanas hay nombres conocidos como los del navarro Ernesto Goñi, formado en el Loyola, o también el de Oleg Kisselev, de la cantera de Anaitasuna.

Uno de los jugadores a los que el Helvetia deberá echar un ojo, entre otros, es sin duda Agustín Casado. El seleccionador Jordi Ribera ya ha tocado con su varita mágica al joven central andaluz, de 25 años, pichichi de su equipo con 68 goles y que en el reciente duelo de la EHF European League en la cancha del Magdeburgo alemán se exhibió con 16 goles. Ahí es nada."Es uno de los equipos en mejor forma"

Quique Domínguez ha dispuesto de muy poco tiempo para preparar el partido de este sábado frente al BM Logroño La Rioja, uno de los equipos que, en su opinión, “está en mejor forma” del campeonato liguero.

“Es un rival duro. Uno de los equipos que en mejor forma está, que atraviesa una mejor condición”, explicaba esta semana.

Tras el choque del miércoles frente al Unicaja Banco Sinfín, donde el Helvetia pudo salvar un punto en el último suspiro, el técnico gallego reconoce que su equipo está “cansado”, metido en una “espiral de partidos” y con la “sensación rara” que deja un resultado como el del otro día en tierras cántabras (29-29). “La sensación final es que rescatamos un punto, pero quizás durante el resto del partido no teníamos que haber llegado tan apretados”, recordaba.

Ahora, pasado ese capítulo, llega el de Logroño. Un complicado adversario que acumula cuatro triunfos seguidos, que atraviesa un buen momento, y que cuenta en sus filas con jugadores como Agustín Casado que, con sus 16 goles ante el Magdeburgo en competición europea, está en boca de todo el mundo. “Se habla mucho de él, pero hay más. Logroño es un equipo al que se le ve en clara progresión desde que comenzó la Liga, que colectivamente está jugando muy bien, y que tiene efectivos con un papel muy destacado”. El preparador de Anaitasuna destacó “su conexión con el pivote, su velocidad, lo bien que juegan las transiciones, el ritmo alto que imponen al partido y, con la única baja de Edu Cadarso, la amplia plantilla que le permite mantener ese ritmo”. Por ello, una de las claves pasará por “ser capaces de seguir ese ritmo alto que ellos quieran imponer”.