- El Helvetia Anaitasuna pudo ejercitarse ayer por primera vez al completo, después de que a mediados de enero se detectase un brote de coronavirus que afectó a buena parte de la plantilla. La semana pasada, el equipo pudo retomar las sesiones, aunque no con todos sus efectivos que, progresivamente, se han ido incorporando al trabajo del grupo. Ahora, los navarros tienen escasos cuatro días de preparación conjunta antes de retomar la Liga Sacyr Asobal este sábado en el Palau ante el Barcelona.

El objetivo principal en estos momentos pasa por ir recuperando poco a poco a los jugadores afectados, a quienes la enfermedad ha golpeado de diferente manera. Mientras que algunos han sido asintomáticos, otros "han estado fastidiados" con bastante malestar, fiebre y hasta reacciones cutáneas, según explicaba ayer el entrenador de Anaitasuna, Quique Domínguez, quien no se ha visto afectado por la covid-19. "Es algo que deja secuelas, con debilidad y con las defensas muy bajas. Y eso que no ha habido ningún caso grave, que es la parte positiva. Para la gente que ha estado ingresada o en la UCI ha debido de ser muy duro", afirmaba.

Para el técnico gallego, es "una alegría" poder contar ya con todos sus efectivos, si bien es consciente de que habrá que tener paciencia, sobre todo después de ver cómo se han ido adaptando los jugadores que empezaron a ejercitarse la semana pasada. "Los primeros días se les veía muy fatigados y cansados. Teníamos que hacer pausas para beber, para respirar y para recuperar más frecuentes de lo habitual", recuerda. Para quienes se han ido incorporando paulatinamente, junto a los de ayer, "el ritmo tiene que ser más lento y progresivo". De hecho, explica Domínguez, "ellos mismos van a ir marcando ese ritmo y habrá que estar muy pendiente de lo que vayan contando los jugadores".

La falta de preparación, la interrupción de la actividad, la recuperación de los afectados y el tener que condensar el trabajo de un mes en apenas unos días es más que posible que acabe pasando factura a un Helvetia que este sábado inicia la segunda vuelta en el Palau ante el líder, el Barça, tras aplazarse el choque de hoy contra el Guadalajara. "No vamos a llegar como nos gustaría, eso está claro. Pero desde el principio de temporada sabíamos que estas cosas podían pasar. Iremos a Barcelona a jugar el mejor partido posible y, a partir de ahora, sólo debemos pensar en poner al equipo en forma y recuperar nuestro nivel para afrontar el calendario que viene", destacó el técnico de Anaita, quien asegura que su plantilla está "con ganas de hacer una gran segunda vuelta". "Percibo ambición en el equipo, ganas de competir bien y hacernos sitio lo más arriba posible. Siempre a partir del juego", concluyó.

Positivos. El lunes 18 de enero, el club navarro informó de que se habían detectado ocho casos positivos de covid en la plantilla, tras someterse el fin de semana a los preceptivos test. Inmediatamente, la actividad y los entrenamientos quedaron suspendidos, iniciándose un período de confinamiento domiciliario. El equipo había retomado su preparación el 7 de enero, tras el parón navideño.

El 28 de enero, regreso escalonado. El pasado jueves, el Helvetia regresó a los entrenamientos, pero no con todos sus efectivos. Los jugadores se han ido incorporando de manera escalonada.

Ante el Barça, el sábado. Tras aplazarse el choque de hoy con Guadalajara, Anaitasuna inicia la segunda vuelta el sábado ante el Barça en el Palau.

"No vamos a llegar como nos gustaría ante el Barça, pero iremos a jugar el mejor partido posible"

Entrenador del Helvetia Anaitasuna