HELVETIA ANAITASUNA (16+16) Bols (portero), Gastón (1), Bazán (5), Edu Fernández (6), Martín Ganuza (2), Izquierdo (5) y Del Arco (7) -siete inicial-. También jugaron Cancio (portero), Héctor González, Fischer, Torriko (4), Etxeberria (1), Chocarro (1) y Aitor Arbizu.

BM BENIDORM (13+13) Rodriguez (portero), Rivero (3), Spiljak, Feuchtmann, Carlos Grau (1), Mario López (5, 1p) y Folqués (3) -siete inicial-. También jugaron Tercariol (portero) (1), Gonzalo Porras (2), Oliver Hernández (1), Parker (4), Lignieres, Borja Méndez (4) y Nikcevic (2, 1p).

Marcador cada cinco minutos 4-1, 6-3, 8-5, 11-7, 13-10, 16-13 (descanso); 19-15, 20-17, 23-22, 26-21, 30-25 y 32-26 (final).

Árbitros Luis Ignacio Colmenero Guillén y Víctor Rollán Martín. Excluyeron dos minutos a Héctor González (2), Chocarro, Ander Izquierdo e Ibai Meoki, por los locales; y a Grau, Lignieres y Olvier Hernández, por los visitantes.

Pabellón Anaitasuna. Unos 520 espectadores.

El Helvetia Anaitasuna sumó ayer su segunda victoria seguida en casa y lo hizo con contundencia, peleando, desplegando su mejor versión de juego, divirtiéndose por momentos y todo ante un Benidom que venía a Pamplona en una excelente dinámica de resultados y al que frenó en seco su escalada.

Quique Domínguez pudo contar, esta vez sí, con un pivote nato que le permitió construir un mejor juego en ataque. Antonio Bazán, tras dos partidos ausente, volvía a la pista, y aunque su fuerte está en el trabajo defensivo, la baja de Aitor García le hizo jugar arriba. Ahí, en la faceta ofensiva, Anaitasuna enganchó un activo, Juan del Arco, que con sus siete goles y su potencial desde el exterior noqueó a la zaga alicantina. Cuando el lateral madrileño está bien, se nota.

El Helvetia firmó una excelente primera parte, en especial los 20 primeros minutos, en los que su juego fluido de continuidad no daba opción a su rival. Los navarros se movieron en ventajas de cinco y seis goles (11-5, m.18, por ejemplo). Se mostraban dinámicos en ataque, intensos en defensa con Fischer y Héctor como baluartes y con Bols respondiendo por momentos. Pero Benidorm está arriba por algo y lo demostró. Parker hacía daño en el ataque, Mario López también y el equipo alicantino aprovechaba bajones puntuales del Helvetia -como cuando se quedó atacando con tres por las exclusiones- para golpear. Así fue reduciendo distancias y así llegó 16-13 al descanso.

El equipo alicantino logró poner un inquietante 16-15 nada más reanudarse el juego, pero en ningún momento fue capaz de igualar o adelantar a Anaitasuna en el electrónico. Bols, con sus intervenciones, se convertía en providencial en la portería. Tercariol, desde la otra meta, no se quedaba atrás, pero pronto empezó a verse superado por el potencial ofensivo local. Torriko asumió el liderazgo, Edu con su zurda le acompañaba, Ander Izquierdo se sumaba a la fiesta y el juego alegre del Anaita se trasladaba al marcador y a la grada, donde el público gozaba. Las distancias se fueron haciendo más insalvables para el Benidorm y el Helvetia se hacía con dos puntos de oro de la mejor forma que sabe: siendo el Helvetia.