GURPEA BETI ONAK Olaia Luzuriaga (portera), Adriana Mallo (1), Naiara Retegui (1), Marta Jaqués (1), Leire Lasheras (3), Itsaso Zulaika y Macarena Sans (1) -siete inicial-. Maitane Larráyoz (portera), Eider Hernández (6), Nahia Legorburu (1), Anne Barandalla, Nerea Aniz, Jaione Etxeberria (1), Aileen Ripa (1), Jennifer Rivero y Valeska Lovera (5, 1p).

VINO DÑAª BERENGUELA BOLAÑOS Miriam Rodríguez (portera), Itziar Martínez (4), Victoria González (2), Nazaret Gracia (1), Mariado Aranda, Odalys Escalona (2, 1p), Miriam Rodríguez y Danae Miranda (7, 4p) -siete inicial-. María Castro (portera), Carmen Arroyo, Marina Fuentes, Lucía Gómez-Calcerrada (4), Mª Jesús Sánchez, Raquel Beltrán (3), Danilza Liranzo, Naiara Rubira y Alba Sobrino.

Marcador cada cinco minutos 1-1, 4-3, 5-4, 7-5, 10-6, 12-7 (descanso); 15-11, 18-13, 19-16, 19-18, 20-19 y 21-23 (final).

Árbitras Mª Victoria Avilés y María Sánchez (Andalucía). Excluyeron dos minutos a las locales Jaqués, Sans (2), Eider Hernández, Aileen Ripa, Lasheras y Valeska; y a las visitantes Miranda, Escalona e Itziar Martínez.

Pabellón Hermanos Induráin. 290 espectadores.

- El Gurpea Beti Onak está obligado a remontar el próximo sábado si quiere seguir vivo en la fase de ascenso a la Liga Guerreras Iberdrola. El equipo navarro cayó ayer en casa, en el partido de ida de la eliminatoria previa, ante un BM Bolaños que fue capaz de darle la vuelta a un duelo que perdía por cinco goles al descanso, si bien se ayudó bastante de los desméritos del rival.

Porque el equipo de Miguel Etxeberria cuajó una gran primera mitad y levantó la euforia de una afición entregada, que veía cómo todas las líneas del equipo se acompasaban a pesar de los nervios iniciales. Con una Olaia Luzuriaga atinada bajo los palos y una sólida 6/0, por momentos adelantada para tratar de neutralizar el peligro de jugadoras como Itziar Martínez, el Beti Onak construía desde atrás. En ataque, el potente lanzamiento exterior de Valeska, la dirección de Macarena Sans o la efectividad de una brillante Eider Hernández contribuyeron a ir marcando diferencias con un Bolaños que no soltaba cuerda, pero que fue sucumbiendo a la superioridad de las locales. Con el 7-4 (m.18), Juanmi Fernández paró el partido para tratar de recomponer el juego de su equipo, pero el Gurpea no perdía de vista el objetivo. Poco a poco fue incrementando su ventaja, que se convirtió en cinco prometedores goles al descanso (12-7).

El paso por vestuarios no sentó bien a las navarras. Costó reconocer al mismo equipo que había desplegado toda su magia minutos antes. Perdió fortaleza defensiva -encajó 16 goles- y, en el plano ofensivo, las cosas no salían. La 6/0 de Bolaños se intensificó, en ocasiones en exceso, y en ataque no fallaban. Itziar Martínez se resarció del marcaje inicial y fue sumando goles, mientras que Danae Miranda no erraba desde los numerosos siete metros de los que dispuso. Del 18-13 (m.45) se pasó a un empate a 19, con un 1/6 de parcial que dolió. Y lastró. El Beti Onak optó por una defensa mixta para tratar de neutralizar a su rival, pero no era fácil. Aunque Leire Lasheras puso el 20-20 a falta de cinco minutos, el Bolaños estaba lanzado a por la remontada y la consiguió. A las navarras les queda la esperanza de la vuelta, aunque sea en casa del enemigo.

Partidos

El sábado 15, a las 21.00 horas, la vuelta. El choque en el pabellón Macarena Aguilar será el 15 de mayo a las 21.00 horas.