Después de brillar en la Copa ante el Barça, con un buen juego a pesar la derrota, al Helvetia Anaitasuna le tocó ayer un día aciago en su regreso a la Liga. Perdió en casa ante el Benidorm por un abultado 24-32, en un encuentro donde llegó a ir once abajo y en el que además de estrellarse contra un atinado portero rival, cometió demasiados errores que le acabaron costando el partido.

Los navarros no tuvieron su día. Las cosas no funcionaban. Ni en portería, ni en defensa, ni en ataque. El balón no encontraba la red deseada, muchos de los pases acababan en mano del contrario y ni siquiera era capaz de sacar provecho de situaciones ventajosas como la ausencia de cancerbero. A ello se le unió, además, la lesión de Héctor González, que tras jugar apenas unos minutos, abandonó la pista con problemas en los dedos de su mano derecha. Un contratiempo a nivel defensivo sobre todo.

El Benidorm, con la efectividad desbordante de James Lewis Parker en ataque -anotó 8 goles-, sacó provecho de los fallos de Anaitasuna. Si a los verdiblancos no les salía nada, a los alicantinos, casi todo. Así, tras un parcial parejo de 2-3, el equipo de Fernando Latorre pronto se despegó. Apoyado en el acierto bajo los palos de Roberto Rodríguez -34,38% de efectividad final-, y con Vallés de director de juego, pronto abrió su primera gran ventaja (2-6, m.8). Momento en el que Quique Domínguez pidió tiempo muerto para recomponer la situación, sacando acto seguido a la pista a Meoki y a Aitor García.

Cancio sustituyó a Bar en la meta navarra y aunque protagonizó intervenciones de mérito, no pudo evitar que Benidorm continuase con su escalada. Varias veces se puso cinco goles arriba, hasta que una pequeña reacción navarra, con los goles de Del Arco, Gastón y Bonanno, hacía al Helvetia acercarse a sólo dos (10-12, m.23). Un espejismo, ya que los errores en forma de pérdidas o paradas rivales insuflaron de nuevo aire al Benidorm, que aprovechó las inferioridades además para irse 11-17 al descanso.

La segunda parte no empezó mejor, con un equipo alicantino que no cedía, que tenía a Parker a su mejor arma ofensiva, mientras que Anaitasuna perdía incluso las oportunidades desde los 7 metros.

Una situación que mermó la confianza de un Helvetia que tenía ayer una buena oportunidad de abrir distancia con el Benidorm, al que igualaba en puntos, y con el que pugna por alcanzar alguna plaza europea.

Ganuza, que ayer reapareció tras sus ausencias por lesión, salió poco antes de que Parker ampliara la ventaja para los suyos a ocho goles (16-24, m.46). No sería la mayor. Los navarros, superados y lastrados por los fallos, vieron cómo su rival se ponía a once dianas (19-30, m.53). Apenas había tiempo para una reacción que tampoco se vislumbraba, con la moral tocada por un Benidorm que seguía a lo suyo y un cancerbero que no aflojaba.

La cuarta victoria consecutiva no fue factible y ahora sólo queda pasar página. Los dos próximos compromisos, ante Puente Genil y Cangas, serán fuera de casa.

FICHA TÉCNICA

Helvetia 24

Benidorm 32

HELVETIA ANAITASUNA (11+13) Juan Bar (portero), Gastón (3), Bazán, Edu Fernández, Chocarro (6, 2p), Izquierdo (5) y Del Arco (2) -siete inicial-. También jugaron Cancio (portero), Meoki (3), Héctor González, Aitor García (2), Pereira, Bonanno (1), Ganuza (2), Etxeberria y Bulkin.

BM BENIDORM (17+15) Roberto Rodríguez (portero), Oliver Hernández, Lignieres (3), James Lewis Parker (8), Carlos Grau (2), Iván Rodríguez (3) e Ivan Nikcevic (4, 1p) -siete inicial-. También jugaron J.M. Martín (portero), Iker Serrano (7), Álvaro Ruiz (1), Nacho Vallés (3, 2p), Vainstein (1), Sempere y Eduardo Calle.

Marcador cada cinco minutos 2-3, 3-6, 5-8, 6-10, 10-12 y 11-17 (descanso); 13-19, 15-19, 16-13, 18-27, 20-30 y 24-32 (final).

Árbitros Alberto García Rodríguez y Miguel Martín Soria Fabián. Excluyeron dos minutos a los locales Edu Fernández, Chocarro, Aitor García, Meoki y Bazán; y a los visitantes Oliver Hernández y Carlos Grau.

Pabellón Anaitasuna. 575 espectadores.