Oviedo - El esloveno Primoz Roglic (Jumbo-Visma), líder de la Vuelta 2019, espera para hoy, en la primera de las dos etapas seguidas asturianas de alta montaña, “ataques desde el principio” de sus rivales y “una carrera súper rápida”.

“Probablemente habrá ataques desde el inicio y una carrera súper rápida en la que el equipo y yo tendremos que estar listos para contrarrestar a los rivales”, dijo, desvelando que entra en terreno desconocido para él. “No conozco los puertos. He visto los perfiles y me han comentado que El Acebo (final de etapa de hoy) es una subida dura y difícil, y que La Cubilla (final de etapa de mañana) es el Galibier asturiano. Intentaré afrontar las dos etapas de la mejor manera posible”, apuntó el líder.

Respecto a la caída de ayer, explicó que no le afectó directamente, aunque sí le detuvo. “No me vi involucrado en ella y no llegué a caer, aunque sí llegue a sacar el pedal”, desveló, asumiendo que “son cosas que ocurren y que sabemos que pueden ocurrir. Hay corredores que aprovechan el día de los sprinters para tomar riesgos, y los de la general tenemos que intentar estar al margen. Al final se va a muchísima velocidad y los corredores de la general lo que tenemos que hacer es mantenernos concentrados e intentar minimizar los riesgos”, resumió.

Quien sí que estuvo involucrado directamente en la montonera fue Alejandro Valverde (Movistar), segundo en la general, que explicaba: “Me he caído casi de parado. Tengo molestias en una muñeca, pero espero que no sea nada... La caída se veía venir, porque había mucha velocidad y mucha tensión”.

Por lo demás, el murciano explicó que había salvado la etapa, “salvo la caída, de manera decente. Eso sí, pese a lo que parecía en el perfil, de llana no ha tenido nada”.

También cruzaba la meta con el susto en el cuerpo el tercer clasificado, el joven Tadej Pogacar (UAE Emirates). “La caída del último kilómetro ha sido durísima. No sé qué pasó. Íbamos muy rápido y muchos ciclistas se cayeron. Yo estoy bien, pero creo que le he hecho daño a Luka Mezgec”.

Su compatriota del equipo Mitchelton se llevó la peor parte en la caída y hubo de ser trasladado al hospital de Oviedo. “No sé cómo está. Espero que todo el mundo esté bien y nadie se haya lesionado”, añadió. - Efe