a Real Sociedad, la SD Eibar y el Deportivo Alavés han avanzado descuentos en las cuotas de abonados como consecuencia del parón competitivo por la pandemia de COVID-19, unos recortes en las cantidades a abonar por sus socios que también está estudiando el Athletic Club. Estos tres clubes son la punta del iceberg de un buen grupo de equipos de la máxima categoría que estudian o tienen decididas medidas en pro de sus seguidores más fieles.

La Real Sociedad devolverá a sus seguidores el 20% del importe del abono anual debido a que los aficionados no podrán volver a Anoeta. El Eibar también devolverá a sus abonados la parte proporcional correspondiente a los partidos jugados a puerta cerrada, incluido el disputado contra la Real Sociedad el pasado 10 de marzo, el último jugado en la Liga y el único por el momento sin público. El Alavés también devolverá la parte proporcional del abono que no han disfrutado sus seguidores.

El Getafe informó el viernes que para "compensar los daños y perjuicios ocasionados por la crisis sanitaria del coronavirus" esta temporada, para la próxima los abonados podrán entrar gratis a los partidos de Liga, pero no a los de Copa y competiciones europeas, que quedan excluidos.

En el Atlético de Madrid, se ha apostado por descontar un 20% del importe del abono de la temporada 2020-21. El Granada abordará una política similar. Con unos 14.000 abonados, el club nazarí ha decidido devolverles en forma de compensación económica la parte proporcional a su carné correspondiente a los seis partidos de Liga que quedan por jugarse en el Nuevo Los Cármenes. El Valladolid ha decidido también devolver el dinero de los seis partidos que les quedan y sus abonados pueden escoger entre tres opciones: que les devuelvan la parte proporcional del abono, que se lo descuenten del de la temporada que viene o que renuncien al dinero.

El Celta también apostará por devolver a sus abonados el importe proporcional de los partidos que se disputen a puerta cerrada y estudia la forma de compensarlos de cara a la próxima temporada. La entidad que preside Carlos Mouriño todavía no ha tomado una decisión definitiva sobre cómo compensará a sus socios de cara al curso 2020-21. Depende, entre otros factores, de la categoría en la que juegue el equipo y el estado de las obras de Balaídos, que llevan varios años de retraso.

El Espanyol también estudia compensaciones, según explicó a través de un comunicado. El club se ha puesto en contacto con sus abonados para expresar su intención de tomar a cabo medidas que aún no ha concretado. La entidad catalana aboga por proponer "soluciones equilibradas y coherentes" para los abonos de la 2019-20. Levante, Betis y Sevilla también estudian fórmulas de compensación.