- La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha trasladado al Comité de Competición las “nuevas informaciones disponibles en el marco de la Operación Oikos, que está vinculada al presunto amaño de partidos, para que este órgano determine si pudieran existir responsabilidades disciplinarias” tras las investigaciones conocidas del presunto arreglo entre Getafe y Villarreal en la temporada pasada.

La RFEF ha explicado que ya denunció ante la Fiscalía estos presuntos hechos en mayo de 2019, “tras recibir un informe de la UEFA en el que se alertaba de posibles graves irregularidades” y que está personada en la causa, que instruye el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 de Huesca.

La prueba principal en el caso Oikos es una conversación por Whatsapp en la que el exfutbolista Paco Esteban le dice a Carlos Aranda, supuesto cabecilla de la trama, que el jugador del Getafe Jorge Molina le ha revelado que siete futbolistas del Villarreal han recibido un total de 1,8 millones de euros por perder, lo cual beneficia al Getafe y permite apostar sobre seguro en ese partido.

Por otro lado, la RFEF acordó abrir un “expediente disciplinario extraordinario por la posible comisión infracciones a las normas deportivas generales, procedimiento que quedó en suspenso tras la decisión de trasladar a la Fiscalía General del Estado toda esta información, al considerar que podría ser constitutivo de infracción penal”.

El siguiente paso lo debe dar el Comité de Competición, analizando la nueva información para que “determine si pudiera existir infracción a las normas disciplinarias”. La RFEF asegura que respeta “el principio de presunción de inocencia de las personas objeto de la investigación”, pero que realizará “todas las actuaciones precisas para defender la integridad de las competiciones”.