GALES Ward; Roberts, Rodon, Mepham, Davies; Morrell, Allen, Ramsey (mIN. 93, Ampadu); James (Min. 75, Brooks), Moore y Bale.

SUIZA Sommer; Mbabu, Elveldi, Schär, Akanji, Rodríguez; Xhaka, Shaqiri (Min. 66, Zakaria), Freuler; Embolo y Seferovic (Min. 84, Gavranovic).

Goles 1-0: Min. 49; Embolo. 1-1: Min. 74; Moore.

Árbitro Clément Turpin (Francia). Mostró tarjeta amarilla a Schär y a Mbabu por parte de Suiza, y a Moore por parte de Gales.

Incidencias Partido de la primera jornada del grupo A disputado en el estadio Olímpico de Bakú ante cerca de 6.000 espectadores.

En la Eurocopa siempre hay partidos de relleno, esos que no crean afición. El Gales-Suiza de ayer pudo ser considerado uno de estos. Un encuentro que nació tedioso y gris, pero que con el paso de los minutos ganó en emoción. Moore y Embolo, los autores de los goles, contribuyeron a ello en la capital azerí. Un punto para cada equipo que les deja por detrás de Italia, con una victoria líder del grupo A, que cierra Turquía.

Los dragones, que en la anterior Eurocopa fueron la gran sorpresa al llegar a las semifinales, dejaron tocar el balón a los helvéticos. La premisa de Robert Page era clara. Robar y salir rápido a la contra, con los centros desde la banda como prioridad. Y aquí apareció el gigante del Cardiff. Kiefer Moore, que no rehuye el choque bajo ningún concepto, se sacó un cabezazo impecable al cuarto de hora de juego que encontró la impecable estirada de Sommer. El portero suizo firmó una parada de mérito. Acto seguido, Moore sufrió una brecha en la ceja. Chapa y pintura. Luego se iba a convertir en el héroe de los galeses.

No tardó en responder Suiza, que poco a poco fue haciéndose dueña del partido. Schar, de espuela, estuvo a punto de abrir el marcador, pero Ward mandó el balón a córner con los pies. El monólogo del combinado helvético continuó, aunque a Embolo y Seferovic, entre otros, les faltó hilar más fino cerca del área. El incombustible Shaqiri, un experto en mantener la posesión con un tren superior más parecido al de un receptor de la NFL, rompía con peligro entre líneas, pero Gales tampoco pasaba apuros, esperando el contragolpe apropiado. Poco o casi nada mostró en el primer acto Gareth Bale.

Antes de llegar al descanso, Suiza estuvo a punto de abrir el marcador. Seferovic la tuvo tras una buen servicio de Embolo, que le dejó solo ante el portero galés. Pero el exjugador de la Real Sociedad la mandó fuera. A los puntos, el gol habría hecho justicia, ya que los hombres de Vladimir Petkovic fueron mejores.

Tras la vuelta de los vestuarios, el encuentro continuó por los mismos derroteros, con los suizos apretando. Y a los cinco minutos de la reanudación, Breel Embolo no perdonó. Primero, el delantero del Borussia Monchengladbach, pura potencia, se fue por velocidad de los dos centrales galeses y su disparo desde la frontal lo mandó a córner Ward. Acto seguido, tras el saque de esquina, Embolo no perdonó de cabeza. Solo en el área pequeña, el atacante suizo hizo el primero.

Sin hacer prácticamente nada una hora, Bale, Ramsey y compañía espabilaron. A balón parado son unos maestros los dragones y el portero suizo no lo pasó bien en cada servicio. Y en el juego directo, Gales encontró premio. Moore se elevó a los cielos y, de un impecable testarazo, batió a Sommer a quince minutos para el final. Desde ese momento el duelo se convirtió en un toma y daca. Y viendo lo que pasó, los suizos pudieron dar las gracias por no salir de Bakú con una derrota en el marcador, ya que los galeses olieron sangre y fueron a por la presa. El VAR anuló un gol de Gavranovic en el minuto 85 por fuera de juego.