- El C.D Aurrera y con él la villa de Liédena ayer se vinieron arriba y dieron rienda suelta a las ganas acumuladas de celebrar su centenario cumplido en marzo de 2020 y truncado por la pandemia a escasos días de la efeméride.

Dos años más tarde, contados 102 de aquel 19 de marzo de 1920 en el que, según se ha transmitido por generaciones, inició su andadura el decano del fútbol navarro, por fin ayer llegó el día esperado.

En Liédena se dieron cita jugadores, ex jugadores y miembros de junta de todos los tiempos, vecinos y vecinas, autoridades, entre las que destacó la presidenta del Gobierno foral, María Chivite, autoridades municipales de los pueblos colindantes y de sus respectivos clubs de fútbol y representantes de instituciones deportivas, para seguir una jornada especial que comenzó en el centro sociocultural y siguió, por la calle que lleva el nombre del club, al campo del El Viñedo.

En estos escenarios se puso de relieve que cien años hacen grande a un club de fútbol por pequeño que sea, y con él a su pueblo. El aniversario del Aurrera habla de la vida y de la ilusión de un pueblo, de sus casas y apellidos, del tesón y el esfuerzo de su potencial humano. De sentido de pertenencia, esfuerzo e identidad. Estos y otros muchos valores fueron ayer palabras del día importante, marcado por la presencia de la propia presidenta del Gobierno, justficada, según expresó, en base a estos valores y a la labor social que ejercen los equipos, como canalizadores de la afición, a su contribución a la sociedad y a los pueblos. “Un equipo de fútbol es la expresión de una sociedad avanzada, comprometida y saludable” destacó.

A María Chivite le precedieron en sus discursos quienes con ella formaron la mesa. El alcalde de Liédena, Ricardo Murillo, satisfecho de representar a la villa en el día histórico, ensalzó las virtudes de “honradez, responsabilidad y compromiso” del Aurrera desde su origen y su “saber hacer pueblo y comarca”. Por su parte, Eduardo Leoz, miembro de la junta deportiva, significó “el esfuerzo y dedicación para sacar adelante un equipo en estos tiempos” y agradeció, emocionado, “todos los apoyos al club de nuestros amores”.

A Miguel Ángel Petrizán , autor del libro C.D Aurrera, 100 años de historia-ehun urte, le correspondió el repaso de los hitos del club: 1927, “excelente para el Aurrera y germen de la competición en Navarra”, los aniversarios 50º y 75º , el paso por las diferentes categorías del club que hoy compite en Primera Regional. Petrizán aportó otras pinceladas de su obra, que fue, dijo, “un encargo realizado con placer y emoción”. Fue en sí el acto de presentación que no pudo ser en su día. Igual que el del vino, Aurrera Centenario, creado para la ocasión.

Rafael del Amo, presidente de la Federación Navarra de Fútbol y vicepresidente de la RFEF ensalzó los buenos años 70, en los que el Aurrera fue campeón de Segunda Regional y añadió que “sigue vivo gracias al esfuerzo del equipo y al papel del Ayuntamiento y otros apoyos”, al tiempo que le animó a seguir.

Reparto del libro y banderín del club de recuerdo a las personas e instituciones invitadas, entre ellas, Rebeca Esnaola, consejera de Cultura y Deporte y Miguel Ángel Pozueta, director gerente del Instituto Navarro del Deporte. Representantes de ayuntamientos, Mancomunidad de la comarca de Sangüesa y de los clubs deportivos de Osasuna, Sangüesa, Lumbier, Aibar y Cáseda.

Tras la inauguración oficial de la calle dedicada al Aurrera, tuvo lugar el emocionado homenaje en el campo de El Viñedo a 25 ex jugadores de los primeros 50 años del club, con minuto de silencio, pasillo de honor, himno y danzas del Grupo Rocamador de Sangüesa.El veterano Lorenzo Lacasa (87 años) hizo el saque de honor del encuentro contra el C.D Mendillorri, con resultado de 9-1. Goleada para el recuerdo del Aurrera y la afición en su centenario.

“El C.D Aurrera es un ejemplo de saber hacer pueblo y comarca con trabajo y tesón ”

Alcalde de Liédena

“Hace falta mucho esfuerzo y dedicación para sacar adelante un equipo en estos tiempos”

Junta directiva del C.D Aurrera