pamplona - Trece años después de que la Plaza de Toros acogiera el último espectáculo de motocross, el Navarra Arena abrió ayer sus puertas al X-Gravity, un evento que reunió a los mejores pilotos del free- style, entre los que se encontraban el francés Tom Pagès, número 1 del mundo, o el australiano Josh Sheehan, el único capaz de realizar un triple backflip -tres giros de 360º seguidos en el aire-, que fue precisamente el que se hizo con el triunfo.

Días antes, Dany Torres y Taka Higashino probaron las instalaciones de cara a los medios, y el propio piloto sevillano intuyó que las instalaciones estarían en las mejores condiciones para el desarrollo de la prueba. Y así fue.

Seis pilotos garantizaron el espectáculo en un circuito de 22 metros de longitud y 12 de altura. Además, como novedad, fue el primer evento en el que se utilizó la pantalla central para favorecer al espectador el seguimiento de la prueba y las repeticiones de los mejores trucos por parte de los riders.

La fiesta se pudo presenciar ya desde los prolegómenos al evento. El estruendo de las vuvuzelas acompañaban la música antes de que los pilotos comenzasen a deleitar a los allí presentes con todo tipo de backflips -volteretas acrobáticas con la moto que, en función de la posición tanto de los brazos como de las piernas, recibe un nombre u otro, acorde con la dificultad de la pirueta-.

Después de la presentación del jurado, llegó el turno de ver en acción a los verdaderos protagonistas de la noche. El primero en saltar a la arena fue el sevillano Dany Torres, que comenzó a arrancar algún tímido aplauso del público. Con el paso de los minutos y de los pilotos, el respetable se fue entregando más y el ambiente de los allí presentes fue inmejorable.

Tras Edgar Torronteras, segundo piloto en saltar al circuito, el japonés Taka Higashino fue el encargado de demostrar su talento en el poco más del minuto que tenía, donde con su backflip lazy boy -maniobra en la que el piloto se acuesta en la moto- terminó por encender al público, que se entregó hasta el final del evento.

Tras el japonés pasaron Maikel Melero y Josh Sheehan. El australiano fue el primero en caer, pues la moto se le resbaló al tocar el suelo y todo quedó en una mera anécdota. La primera ronda la finalizó el francés Tom Pagès que una doble voltereta mortal hacia atrás dejó claro por qué es el número 1 del mundo en el free-style. El motorista francés fue el vencedor de la primera ronda, consiguiendo un total de 81 puntos por parte del jurado -los puntos se obtienen en función de la complejidad de las maniobras que realizan los riders-.

Al final, Josh Sheehan remontó para hacerse con el triunfo y estuvo acompañado en el podio por Taka Higashino y Maikel Melero.