Madrid - Rafa Nadal se despidió de su andadura en el torneo de Acapulco (México), puntuable para la ATP y que se disputa sobre pista dura, al perder en la segunda ronda ante el australiano Nick Kyrgios por 3-6, 7-6(2), 7-6(6), en un partido donde gozó de tres bolas de partido.

El balear, primer cabeza de serie, pone fin a su idilio con el evento mexicano, en el que había llegado a la final en sus tres presencias (2005, 2013 y 2017), con dos títulos, y donde hasta ahora sólo había perdido la final de hace dos años ante el estadounidense Sam Querrey.

Tras derrotar con autoridad al alemán Mischa Zverev, al de Manacor le tocaba un duro obstáculo en la figura del díscolo Nick Kyrgios, capaz de lo mejor y lo peor en todos los aspectos en una pista y que volvió a mostrar su carácter de showman en muchos momentos, algo que molestó visiblemente al número dos del mundo que, pese a todo, tuvo el partido en su mano con la ventaja de 6-3 en la muerte súbita definitiva.

El australiano intentó todo para llevarse el partido y tras ceder la primera manga, pidió la presencia del médico en la pista porque tenía problemas estomacales. Después, lo hizo por molestias en las rodillas, y después por dolores de espalda. Además, recibió un warning por mandar callar al público en lo que fue una muestra de todo el repertorio de este peculiar jugador.

crítica de Nadal Rafa Nadal dijo tras el partido que Nick Kyrgios “no es mal chico, pero le falta el respeto al público, al rival y a sí mismo también”, lo que no le impidió felicitarlo por la victoria.

“Tengo muchos años en el circuito y no porque un chico se dedique a hacer cosas extrañas dentro de la pista me va a despistar. Otra cosa es que creo que tiene que mejorar en ese sentido. Pero me ha ganado y hay que felicitarle”.

Respecto a su actuación, comentó: “En diez partidos como éste ganaría al menos ocho, pero hoy me ha tocado perder... Ahora voy a Indian Wells, un torneo que me gusta, y tengo semana y media para entrenarme bien”. - Efe