Pamplona - La baja por sanción de Nacho Vidal, que el pasado lunes vio en Málaga su quinta tarjeta amarilla de la temporada, va a obligar al entrenador de Osasuna, Jagoba Arrasate, a realizar al menos un cambio en su once inicial con respecto al que presentó en La Rosaleda. Sin embargo, el técnico no desveló cuál será su apuesta, aunque sí que reveló los nombres de los dos candidatos a ocupar la posición de lateral derecho que va a dejar vacante el valenciano. “Todavía no he decidido nada”, dijo el preparador vizcaíno antes de apostillar que “es verdad que la opción natural es Lillo, que lleva una buena semana de entrenamientos, pero también es cierto que acumula tres meses sin competir”. En este punto, también apuntó otra posibilidad: “Podemos jugar con la polivalencia de Oier. Esa puede ser la duda. Queda el entrenamiento de mañana (por hoy) y será una de esas dos opciones, pero no lo he decidido todavía”. No obstante, la recolocación de Oier en el lateral derecho obligaría al técnico a buscar un sustituto para el estellés en el centro del campo.

Arrasate confesó que la ausencia de Nacho Vidal es un contratiempo importante porque “lleva tiempo estando bien”, aunque puntualizó que “le sacaron la quinta amarilla y tendrá que descansar”, un problema que, a su juicio, no lo es tanto porque “Lillo seguro que está deseando volver a jugar y Oier, si tiene que jugar de lateral, lo hará, mientras que Nacho podrá recuperar y estar disponible para el partido del próximo viernes”, fecha en la que Osasuna visita al Tenerife.

En este sentido, el entrenador rojillo destacó que “veo a la gente enchufada”. “Tenemos a muchos jugadores con cuatro amarillas y ojalá no caigan todos en el mismo partido, porque entonces sí sería un problema, pero no podemos jugar a medio gas. Tenemos que jugar con todo y, si cae alguno, tendrá que entrar otro. La plantilla está demostrando que podemos contar con todos y estoy tranquilo”, confesó el técnico. - J.L.