Bengalas, cánticos, abrazos y lágrimas para homenajear a un atleta que, después de muchos años de esfuerzo y sacrificio, ha podido cumplir su sueño. Asier Martínez Etxarte (22/4/2000) ha tenido un recibimiento de auténtico campeón en la estación de tren de Pamplona. Amigos, familiares y compañeros han querido abrazar al vallista después del histórico cuarto puesto que logró en el Europeo de pista cubierta disputado en Torun (Polonia), su primera gran cita internacional. El joven atleta de Zizur no ha podido ocultar su emoción y ha llegado a derramar alguna lágrima ante el cariño de sus seres queridos. Esos que siempre le han apoyado y que ahora vibran con cada uno de sus éxitos. Un soporte incondicional y necesario en el exponencial crecimiento del vallista.

"No me lo esperaba para nada y quiero darles las gracias a todos por venir. Ha sido increíble y de verdad que estoy muy agradecido a cada uno de ellos. Más que por el resultado, estoy contento por esto, por todo el apoyo que recibo durante todo el año, que es algo increíble", ha explicado visiblemente emocionado. El de Zizur ha llegado a la estación de tren de Pamplona a las 21.40 horas, después de un eterno viaje desde Polonia. Salió a la una de la madrugada del hotel para coger el vuelo Varsovia-Frankfurt y viajó desde allí a Madrid, donde se despidió del resto de la expedición nacional y continuó su trayecto en tren hasta Pamplona. Después de casi un día de viaje y pese al cansancio acumulado, Asier Martínez ha podido disfrutar de un recibimiento más que merecido. El vallista, que ha bajado del tren tranquilo y con las manos en el bolsillo, se ha visto sorprendido por todos sus compañeros del Grupompleo Pamplona Atlético que se han lanzado a abrazarle.

Recibimiento al atleta Asier Martinez

Recibimiento al atleta Asier Martinez

La 'Azpi Crew' y el 'Swan Team'

Su grupo de entrenamiento, conocido como Swan Team, ha acudido al completo a la estación de tren. "Les he dejado terminar un poco antes para que pudieran venir aquí", ha señalado el técnico François Beroringyan. Así, uno a uno todos los compañeros han ido abrazando al cuarto de Europa. Jon Seriola, Ander Iriarte, Nerea Bermejo, Laila Lacuey, Martina Wiafe, Teresa Abascal e Iker Alfonso, entre otros, han pasado emocionados por los brazos del vallista. Una alegría que justifica miles de horas de entrenamiento, series interminables bajo las inclemencias del tiempo en Larrabide y cientos de kilómetros para competir. Son una familia y se nota.

Precisamente después ha legado el turno de saludar a sus padres, que han esperado con tranquilidad en un segundo plano. Elena Etxarte, que fue plusmarquista nacional de 60 metros vallas, sabe la dificultad de lograr semejante éxito en esta prueba. El de Zizur tiene un espejo perfecto en el que mirarse en casa.

La última sorpresa para Asier Martínez llegó en la calle, donde la Azpi Crew ha recibido a su amigo con bengalas, cánticos y una pancarta en la que se leía: Gure txapelduna. Zorionak. Una quincena de jóvenes que, pese a ser un lunes por la noche, no han dudado en acercarse a la estación y celebrar con orgullo que Asier Martínez, ese que salta vallas por la tele, es su amigo. Un amigo para toda la vida.

Recibimiento al atleta Asier Martinez

Recibimiento al atleta Asier Martinez

Un europeo perfecto

Asier Martínez se ha mostrado muy satisfecho con su actuación en el Europeo. "Estoy muy feliz, en una nube. El Campeonato no podría haber ido mejor y estoy muy contento. La final fue muy rápida, con una llegada muy justa y estoy muy satisfecho por mi rendimiento".

El sábado logró la clasificación para las semifinales con un tiempo de 7.67, tan solo superado por el polaco Czykier. El domingo, repitió puesto y tiempo en la semifinal, solo por detrás del campeón Belocian, que estaba totalmente fuera de su alcance. "Hablaba con François Beoringyan antes y después de cada carrera, intentando mejorar cada aspecto técnico para dar el máximo rendimiento posible", explicó.

Y entonces llegó la final, el momento de la verdad. Y al navarro le tocó la calle ocho. En principio, un lugar asignado a actores secundarios y que no gusta nada a los velocistas. Pero fue un alivio para Asier Martínez. El de Zizur corrió a su antojo, sin presión, sin fijarse en los demás, con la única intención de dar el máximo y demostrarse a sí mismo su nivel. Y vaya si lo hizo. "Prefería no correr al lado de Belocian, porque su frecuencia de zancada es muy alta y además sale mucho mejor que yo. Era mejor no tenerlo al lado, porque me podía perjudicar para establecer mi propio ritmo. Me han puesto en la calle 8 y la verdad es que me ha venido bien".

El atleta del Grupompleo salió bien, pero sigue lejos de los primeros apoyos de otros atletas como Dal Molin, que corría por la calle siete. "He metido bien los primeros apoyos, que es lo que me suele costar más, y he conseguido no despegarme del grupo, que era algo fundamental para mí". Pese a no ser el más rápido en los primeros metros, siempre remonta. No pierde velocidad en el paso de la valla y supera a los rivales con una facilidad pasmosa. Logró una progresión espectacular y se quedó a solo cuatro centésimas del podio, que cerraba precisamente Dal Molin, al que se iba acercando en cada obstáculo.

Fue, sin duda, la mejor carrera de toda su vida. Reacción en 150 milésimas, siete apoyos antes de afrontar el primer obstáculo, tres pasos entre cada una de las cinco vallas y a lanzarse sobre los cuadros. Todo ello en 7.60, récord de España sub-23, igualando la cuarta mejor marca española de todos los tiempos. Y remontando. Con el cuerpo hacia adelante y la cabeza baja. Siempre mirando al suelo, donde, desde luego, sigue teniendo los pies. La semana que viene volverá a Bilbao a estudiar Ciencias Políticas y continuará teniendo el inestimable apoyo de amigos, familiares y compañeros de equipo. Esos que nunca le fallan y con los que seguirá volando en cada valla.