Los Phoenix Suns, de la mano de un excepcional Chris Paul, que consiguió un doble doble de 26 puntos y 15 asistencias, humillaron a los Denver Nuggets con un 123-98, lo que les adelanta 2-0 en la serie de la segunda ronda de los playoff.La derrota de la noche del miércoles en el Phoenix Suns Arena ante 16.529 espectadores es la pérdida más abultada de los Nuggets esta temporada y plantea dudas sobre la capacidad de los de Denver de recuperar terreno cuando, a partir del viernes, jueguen los dos próximos partidos en casa.

Tras el partido, el entrenador de los Nuggets, Michael Malone, no se mordió la lengua. "Ha sido una actuación vergonzosa", afirmó Malone, que añadió que los Suns les habían "pateado el trasero" y que va a tener problemas para encontrar "cinco jugadores que quieran dejarse todo en la pista" en el próximo partido, el viernes.

"Muchos jugadores jugaron realmente mal esta noche", terminó declarando Malone.

Lo que debería haber sido una oportunidad para celebrar el MVP que ganó el martes la estrella de los Nuggets, el pívot serbio Nikola Jokic, se convirtió en un drama para el equipo de Denver. Los Suns nunca dieron la menor opción a unos Nuggets que fueron nulos en ataque -sólo pudieron contar con los puntos de Jokic- e inexistentes en la defensa.

NUGGETS SIN ATAQUE

Jokic fue el máximo anotador del partido con 24 puntos, y consiguió un doble doble con 13 rebotes. Además hizo 6 asistencias y 1 robo.

El base argentino de los Nuggets, Facundo Campazzo, tuvo rachas de buena defensa ante Chris Paul y Devin Booker, pero en ataque sólo aportó 3 puntos, fruto de 1 de los 5 triples que intentó. Campazzo también falló los 2 tiros de dos que lanzó.

Sin ideas ofensivas, los Nuggets intentaron resolver el ataque con tiros de tres, pero su principal baza en esa categoría, el alero Michael Porter Jr., estuvo desaparecido durante toda la noche. Porter Jr. anotó sólo 2 de los 9 triples que intentó y 1 de los 4 tiros de dos.

Porter Jr., que no anotó su primer triple hasta bien entrado el tercer cuarto, cuando su equipo ya perdía por 16 puntos, terminó la noche con 11 puntos, 6 rebotes y 1 asistencia.

En el otro lado de la cancha, seis jugadores de Phoenix consiguieron anotar 10 puntos o más. Booker, que también terminó la noche con un doble doble, fue el máximo anotador de su equipo con 18 puntos, 10 rebotes, 2 asistencias y 1 robo. Mikal Bridges anotó 16 puntos y 2 rebotes, mientras que el pívot Deandre Ayton terminó la noche con un doble doble de 15 puntos y 10 rebotes.

CHRIS PAUL DOMINA

Las esperanzas de los Nuggets de salir airosos de Phoenix duraron 14 segundos, exactamente el tiempo que estuvo el equipo de Denver por delante del marcador al inicio del partido. Tras anotar la primera canasta del encuentro con un tiro de Jokic, los Nuggets nunca volvieron a estar por delante en el marcador.

Mientras Paul manejaba con paciencia a su equipo en el ataque para encontrar los huecos, los de Denver intentaron hallar un atajo a base de triples, una estrategia fallida que pagaron cara.

En la primera mitad, los de Denver lanzaron 22 triples y sólo convirtieron 4, un 18 %. Porter Jr. intentó 6 sin anotar ninguno. Campazzo 5 de los que anotó 1. Y Austin Rivers hizo 1 de los 3 que lanzó.

En esos primeros 24 minutos, los Suns intentaron 15 triples y anotaron 6, un 40 %.

A pesar de esa diferencia, los 15 puntos de Jokic mantuvieron con vida a los Nuggets durante la primera mitad que concluyó con un 52-42 en el marcador.

A la vuelta del descanso, todo empeoró para los de Denver. Los de Colorado siguieron sin ideas en ataque, o sin ganas de trabajar según Malone, y en poco menos de 6 minutos los Suns les endosaron un parcial de 17-6 con Paul repartiendo juego a diestro y siniestro.

El veterano base de los Suns terminaría el tercer periodo con sólo 3 puntos pero 6 asistencias. Y en defensa, los Suns ahogaban a Jokic y Aaron Gordon, otro de los titulares que había sido bastante efectivo durante la temporada.

Con una diferencia de 21 puntos, 69-48 en el marcador a falta de 7 minutos para el final del tercer cuarto, los Nuggets básicamente abandonaron el partido. Cuando concluyó el periodo, los Suns estaban ya 19 puntos por delante, 86-67.

Malone retiró a sus jugadores titulares de la cancha en los 12 minutos finales y lo mismo hizo Monty Williams, el entrenador de los Suns. Con los jugadores del banquillo, los de Phoenix llegaron a colocarse 31 puntos por delante. Al final, la diferencia fue "sólo" de 25.