- Uterga-Garcés, en Primera categoría, y Aldabe-Barricart, en Segunda, se llevaron ayer en el frontón Labrit las txapelas del 6º Torneo de Remonte Casco Viejo de Pamplona, organizado en beneficio de Asociación de Ayuda a Niños con Cáncer de Navarra (ADANO). Uterga-Garcés se impusieron por 35-29 a Ezkurra II-Agirrezabala, en una final marcada por la magia de Uterga para acabar los tantos con todo tipo de remates. En Segunda, Aldabe-Barricart rubricaron su torneo perfecto, en el que han ganado todos los partidos, al derrotar por 35-19 a Jabalera-Saldias.

Entre ambas finales, la Fundación Remonte y la empresa e-Remonte Beti Euskal Jai rindieron un bonito homenaje al servicio sanitario al completo por su vital labor durante la pandemia del Covid 19. El público, que acudió en buen número e hizo necesario abrir el palco del Labrit, además de la grada de cancha, les ovacionó con sus aplausos. Hubo un respeto riguroso en al protocolo de seguridad.

Xanti Uterga ofreció un recital de calidad y bravura ofensiva en la gran final de Primera, perfectamente complementado con un Aritz Garcés que ha demostrado su valía en la élite del remonte en este torneo, el primero de la nueva empresa e-Remonte.

El duelo comenzó con un 6-1 favorable a Uterga-Garcés, que tuvo rápida respuesta de Ezkurra II-Agirrezabala (6-6). Fue un espejismo, ya que los vencedores abrieron brecha con importantes ventajas, que llegaron a los 12 tantos (10-7, 16-10, 23-14). Uterga aprovechaba la menor oportunidad para acabar los tantos. Dejó uno para el recuerdo, lo nunca visto en el remonte. En el 34-23, firmó con gran finura una dejada al ancho que se fue abriendo hasta morir en la contracancha, al estilo manista.

Con todo decidido, Ezkurra II-Agirrezabala maquillaron el resultado con seis tantos seguidos, aunque ya era tarde para remontar (35-29).

En Segunda, Aldabe y Barricart hicieron buenos los pronósticos al imponerse con autoridad a Jabalera-Saldias (35-19). Los txapeldunes aprovecharon los nervios de sus rivales para adelantarse con un 9-0 que les allanó mucho el camino. La pelea fue desigual en los dos frentes. En los cuadros delanteros, Aldabe jugó con gran habilidad en defensa y puntillero cuando tuvo ocasiones claras. En la zaga, Barricart se confirmó como el hombre del torneo con un juego muy sólido y eficaz.