betelu - Hace 50 años, un grupo de empresarios guipuzcoanos puso en marcha en Betelu Wisco Española, una pequeña fundición de bronce por colada continua. Comenzó con seis trabajadores y en la actualidad son más de 130 en el grupo, 80 en la planta de Navarra. También cuenta con otra planta en Lezo y una filial comercial en India. Además, las perspectivas de futuro no pueden ser mejores. “Queremos facturar por encima de los 100 millones, con una producción de más de 10.000 toneladas y con más de 200 personas en plantilla” señaló ayer Javier Bollo Arocena, director general del grupo, en el acto conmemorativo de este medio siglo de andadura de la compañía.

En este tiempo, Wisco se ha convertido líder en Europa y referente internacional en la fabricación y distribución de bronces y latones, con presencia en los cinco continentes y más de 50 países, según destacó Bollo. Con una capacidad productiva de 14.000 toneladas al año, la producción del pasado año fue de 8.000 toneladas. Más del 70% fueron exportaciones. “Estamos aquí por el valioso trabajo de todos los que han pasado por la empresa y los clientes. La colaboración de todos los integrantes de la plantilla ha sido, es y será decisiva” aseguró el director general.

El principal impulsor del grupo fue Venancio Díez Arana, que supo de la colada continua de bronce que se hacía en Francia y pensó que era una actividad con futuro. Se unieron al proyecto Eduardo Iglesias, Francisco Luzuriaga, Marcelino Ibarrola y José Manuel Kutz. El primero, presidente fundador del grupo, recordó que en los años 60 se puso en marcha el Plan de Promoción Industrial de Navarra y que transmitieron a su director, José Saralegui, la necesidad de una superficie de 10.000 metros cuadrados y agua. Si bien en un principio se barajó Goizueta y Betelu, las facilidades puestas por el Ayuntamiento de esta localidad decidieron a sus impulsores a instalarse a orillas del Araxes.

Por otro lado, recordó la crisis de 2009, que obligó a un nuevo plan de gestión, reducción de trabajos exteriores y ajustes de eventuales. “Economía de guerra” cómo señalo. Pero el grupo ha salido fortalecido del cambio de rumbo. “Es necesario adaptarse al nuevo entorno y seguir creciendo” señaló, al tiempo que apuntó que el objetivo es llegar a 15.000 toneladas. Pero sería imprescindible ampliar las instalaciones de Betelu, de 11.000 metros cuadrados en la actualidad. Así, pidió a las autoridades presentes un plan desarrollo de terrenos junto al actual y al otro lado del río. “De no ser así, habrá un futuro incierto en dos años” aseguró. Asimismo, destacó la apuesta del grupo por la calidad del producto y por la innovación y abundó en la necesidad de formación de la plantilla.

CELEBRACIONES En el acto conmemorativo, al que acudieron trabajadores, socios y consejeros entre otros, también intervino el alcalde de Betelu, Mikel Rekalde, y la presidenta del Gobierno de Navarra, Yolanda Barcina. Estuvo amenizado por Oreka TX, que exploró los sonidos de los tubos de Wisco a modo de txalaparta, y dantzaris de Kukai Taldea. La presentadora fue Laura Chamorro, de Teledonosti. Tras un lunch, las celebraciones continuaron con una comida en Venta Mugiro.