Pamplona Un 35 % de los pensionistas navarros, casi cuatro de cada diez, considera que su pensión es buena o muy buena, frente a un 65 % que afirma que es regular, mala o muy mala, según la VI Encuesta sobre la Jubilación y las Pensiones, elaborada por el Instituto BBVA de Pensiones.

Un 32 % de los encuestados cree que recibirá menos de lo que ha cotizado, lo que contrasta con las estimaciones según las cuales un pensionista medio recupera aproximadamente 12 años después de jubilarse el valor de las cotizaciones realizadas por él y su empleador.

Los resultados de la encuesta para Navarra muestran que, si bien un 71 % de los pensionistas de jubilación actuales supieron a cuánto ascendía su primera pensión en el momento de cobrarla, menos de la mitad (47 %) reconoce haber ahorrado para la vejez antes de jubilarse.

El desconocimiento del importe de la prestación que representa la principal fuente de ingresos durante la vejez sugiere que los hoy jubilados entraron en su jubilación con tranquilidad y confianza generalizadas en el sistema de pensiones como mecanismo de sustitución de rentas.

Sin embargo, destaca el estudio, en la actualidad la confianza no es completa: cuando se pregunta a la población de 60 o más años si las pensiones que concede actualmente el Estado están garantizadas, un 66 % de los entrevistados asiente, mientras que un 25 % opina lo contrario.

Menor es la confianza en las pensiones de quienes hoy tienen entre 40 y 50 años. Preguntados sobre si creen que esas pensiones están aseguradas, el 53 % de los entrevistados navarros no lo cree, frente al 64 % de la media nacional.

Aunque los entrevistados consideran que las pensiones de quienes nacieron en los años 60 y 70 del pasado siglo son inciertas y aunque un 84 % afirma sentirse preocupado por las pensiones de las generaciones más jóvenes, la mayoría de los actuales pensionistas (un 51 %) rechaza la idea de reducir la prestación que cobran en un 10 % para asegurar las pensiones de futuras generaciones.

Un 86 % de los entrevistados navarros opina que el Gobierno debe revalorizar todos los años las pensiones para que no pierdan poder adquisitivo, mientras que solo el 8 % considera aceptable que, si la Seguridad Social tiene déficit, el Gobierno prescinda de revalorizar las pensiones.

El rechazo al ajuste de las pensiones o a la no revalorización se asienta sobre la consideración de las pensiones como una prestación por la que los pensionistas han contribuido sobradamente a través de sus cotizaciones sociales.

Un tercio de los pensionistas entrevistados (32 %) estima que, sumando todo lo que van a cobrar como pensionistas, recibirán menos de lo que cotizaron durante su carrera laboral. Un 28 %, entretanto, piensa que la Seguridad Social va a acabar pagándoles más de lo que cotizaron.

En cuanto a la situación general de los mayores, buena parte de la población navarra de 60 o más años se siente bien físicamente y bastante segura económicamente.

El 98 % de los entrevistados navarros tiene al menos una vivienda en propiedad y la gran mayoría declara tener descendencia (una media de 2,5 hijos).

Por otra parte, el 99 % dice poder pagar puntualmente los gastos relacionados con la vivienda principal; el 95 %, mantener la vivienda con una temperatura adecuada; el 80 %, disfrutar de las actividades de ocio que más le gustan; y el 78 %, afrontar gastos imprevistos de hasta 650 euros.

Los resultados de la encuesta también indican que una proporción elevada de navarros mayores de 59 años considera la vivienda como un bien del que extraer ingresos en caso de necesidad durante periodos de la vejez que requieran gastos superiores a los regularmente disponibles.

Así, un 59 % de los entrevistados que tienen una vivienda en propiedad estaría dispuesto a venderla, hipotecarla o alquilarla si les hiciera falta más dinero para vivir (un 38 %, en cambio, no lo haría).