pamplona - Viscofan ha recuperado en 2019 su buen tono en la Bolsa y completará a mediados de año, una vez que lo aprueba la junta de accionistas, el pago de un dividendo histórico. Con los títulos cotizando de nuevo por encima de los 55 euros, la empresa navarra habrá abonado, con cargo a los resultados de 2018, 1,73 euros por acción, el más elevado de su historia y superior en un 11,5% al abonado el año anterior.

Valor anticíclico como pocos, la empresa presidida por José Domingo Ampuero presenta una curva de cotización histórica envidiable. Y si antes de la crisis, con el Ibex en máximos, rondaba los 15 euros por acción y abonaba en torno a los 17 céntimos de dividendo, una década más tarde sus números no tienen nada que ver. A comienzos del pasado otoño llegó a superar los 62 euros, si bien el anuncio de un recorte en el dividendo le supuso un desplome histórico en las acciones, hasta llegar a Navidad en los 48 euros. En lo que va de año, sin embargo, Viscofan se ha recuperado de forma clara -acumula más de un 20% de revalorización- y ayer a media tarde rondaba ya los 55,50 euros por título.

Pero si la evolución en el precio de la acción es llamativa (se ha multiplicado por 3,5 y es ya el tercer valor más caro del Ibex) , todavía resulta más significativo el modo en que la empresa ha incrementado la retribución a sus accionistas, nueve veces superior a la que se abonaba en 2008. Pocas empresas lo han incrementado del mismo modo y menos aún lo han hecho sin recurrir a un endeudamiento excesivo. Viscofan, que cuenta con una sólida posición financiera y un patrimonio de 757 millones de euros, lo ha hecho finalmente en 2018: su deuda bancaria se ha incrementado desde los 41,1 millones hasta los 79,6 millones. Aunque, tal y como explicaba la empresa en la presentación de sus resultados, tanto el pago a los accionistas como los proyectos de inversión y las adquisiciones realizadas “han sido financiadas en su mayoría por los flujos de caja procedentes de las operaciones”.

El incremento en el dividendo, que pasa de 0,19 a 1,73 euros en apenas una década, no ha convertido a Viscofan en una de las empresas más rentables respecto al precio de su acción. Pero sí en una magnífica inversión a largo plazo para quienes apostaron por ella hace unos años, cuando su rentabilidad era muy inferior. En 2008, por ejemplo, el dividendo apenas suponía el 1,2% del precio de la acción, mientras que en la actualidad rebasa el 3%.

De esta manera, y amparándose en unas ventas y unos resultados crecientes, que únicamente se han moderado en los últimos ejercicios, Viscofan ha ido cumpliendo con las demandas de un accionariado en el que se cuentan importantes fondos de inversión europeos, así como algunas de las principales fortunas españolas.

La más relevante de todas las participaciones es la de Corporación Alba, el vehículo inversor de la familia March, que ha ido elevando su participación en la empresa navarra de forma progresiva. Controla ya el 13% de la empresa navarra, con lo que supera en mucho a los siguientes accionistas: los fondos APG (10,06%) y Marathon y el Norges Bank, así como Angustias y Sol SL (los Domecq Bohórquez), que cuentan con un 5%.

Ellos son los principales beneficiados por el incremento en la remuneración de la empresa, presidida desde hace ya una década por el getxotarra José Domingo Ampùero, que cumple 70 años en 2019. Ampuero, que es asimismo consejero de la Corporación Alba. Ampuero, con más de 61.000 acciones en Viscofan (0,13% del total) es uno de los accionistas más relevantes de cuantos componen el consejo de administración, si bien lejos de la posición de Néstor Basterra, que se acerca a las 125.000 acciones, por lo que, solo en dividendos, percibiría con cargo a los resultados del año pasado algo más de 216.000 euros.

Viscofan, que controla el 26% de un mercado mundial de casi 3.000 millones de euros, tiene previsto asimismo seguir creciendo en 2019, tras lograr en 2018 un resultado de 123,8 millones de euros. “Los primeros meses confirman la tendencia de crecimiento en los volúmenes de mercado”, explicaban desde la empresa, quien concretaba que espera crecer en ingresos entre un 6% y un 8%, mientras que el resultado bruto recurrente avanzaría entre un 10% y un 13%, con lo que el resultado neto podría mejorar entre un 8% y 14%, con lo que podría superar los 130 millones de euros. El grupo tiene previsto asimismo invertir 60 millones de euros, un 15% menos que el año pasado.