vilna - El Banco Central Europeo (BCE) ha frenado la normalización de la política monetaria y se plantea cambiar de dirección al posponer, al menos seis meses, la subida de los tipos de interés y discutir, incluso, una bajada de la tasa de interés de depósito y volver a comprar deuda.

El Consejo de Gobierno del BCE se reunió ayer en Vilna, capital de Lituania, para debatir la coyuntura después de que la Reserva Federal (Fed) abriera esta semana la puerta a un recorte de los tipos de interés en EEUU para contrarrestar los efectos del aumento de las tensiones comerciales con China y México.

El euro subió en un primer momento por encima de 1,13 dólares, pero volvió a caer cuando el presidente del BCE, Mario Draghi, explicó que han discutido una bajada de las tasas de interés a los depósitos bancarios y reactivar el programa de compra de deuda de la zona del euro.

Dado que la Fed ya ha comunicado una bajada del precio del dinero, una reacción más suave del BCE hubiera apreciado al euro, algo que no interesa a las empresas exportadoras.

La Fed cambia la dirección de su política monetaria, pero ya llevó a cabo su normalización. En cambio, el BCE no ha normalizado todavía la suya y se plantea ahora volver a expandirla más.

En rueda de prensa, Mario Draghi dijo que el Consejo de Gobierno discutió una bajada de la tasa de interés de depósito, la que cobra a los bancos por el exceso de reservas, que está en el -0,4 % ahora. Tras la reunión del Consejo de Gobierno en la capital de Lituania, Draghi afirmó que también discutieron reactivar el programa de compra de deuda.

El BCE dejó de comprar deuda en enero y tan sólo seis meses después se plantea volver a hacerlo.

El presidente del BCE señaló que la política monetaria del BCE está lejos de la normalización porque el resto del mundo está también lejos de la normalidad.

El BCE ha decidido por unanimidad posponer la primera subida de los tipos de interés hasta bien entrado 2020, como mínimo hasta después del primer semestre.

La entidad retrasa por segunda vez la primera subida de los tipos de interés en la zona del euro desde 2011 porque en marzo dijo que los mantendría ahí hasta finales de 2019 y anteriormente había indicado durante bastante tiempo que hasta después del verano de este año.

La entidad seguirá prestando a los bancos al 0 % en las operaciones semanales de refinanciación y a un día al 0,25 % (facilidad marginal de crédito) y les seguirá cobrando un 0,4 % (facilidad marginal de depósito) por el exceso de reservas a un día.

Cuando el BCE comience a subir las tasas de interés será primero en la tasa de depósito, pero si han discutido una bajada, esa subida cada vez parece más lejana. El BCE ha revisado al alza una décima las previsiones de crecimiento de la zona del euro en 2019, hasta el 1,2 %, (1,1 % previsto en marzo). Aunque las baja para el 2020 dos décimas hasta el 1,4 % (1,6 % en marzo) y una décima los del 2021 hasta el 1,4 % (1,5 %).

Añadió que la decisión de retrasar la subida de los tipos de interés refleja “el aumento de la incertidumbre” por “la creciente amenaza del proteccionismo y el “brexit”, así como las vulnerabilidades de los mercados emergentes. Además, el BCE prevé una inflación del 1,3 % en 2019 (1,2 % en los pronósticos de marzo) del 1,4 % en 2020 . - Efe

1,4%

El BCE recortó su expectativa de expansión y subida de los precios para 2020, con un ritmo de crecimiento del PIB del 1,4%, dos décimas por debajo de su previsión de marzo, misma cifra que en 2021. Asimismo, corrigió una décima al alza sus previsiones de crecimiento e inflación para la zona euro en 2019, situándolas en el 1,2% y el 1,3% respectivamente.