altsasu - El seguimiento de la huelga general fue ayer masivo en Sakana, Leitzaldea y en menor medida en Lekunberri, según afirmaron ayer desde ELA y LAB, sindicatos mayoritarios en la zona noroeste. Lo cierto es que la mayoría de las empresas más importantes cerraron. Era el caso de Cementos Portland, Magotteaux, Sakana Koop, Aceros Moldeados Lacunza, Guerra, Mecalsa, Maderas Navarro, Electricidad Ramos, Industrial Barranquesa y Torraspapel entre otras. "También ha habido paros parciales en prácticamente todas las empresas de la zona", señaló Gorka Vierge, responsable de ELA en Sakana.

Así fue en Sunsundegui, la empresa con más trabajadores de Sakana, dónde secundaron la huelga 143, 100 fijos y el resto eventuales. "Son más de 200 eventuales. Hemos conseguido uno de los paros más importantes de los últimos años", señaló Gaizka Uharte, responsable de LAB en la zona. "El paro ha llegado a todas las fábricas, sobre todo a las empresas más representativas. Se ha puesto en el centro del debate las pensiones y la precariedad", incidió Uharte, quién aseguraba que el seguimiento superó ayer con creces al registrado en la anterior huelga general, en 2013 "La gente está harta y tiene ganas de recuperar derechos y por ello ha sido más fácil enganchar a esta huelga y sobre todo en las empresas donde hay una tradición sindical", señaló.

Asimismo, la huelga tuvo amplio eco en la administración, con los ayuntamientos regidos por EH Bildu cerrados al público y otros con servicios mínimos, como fue el caso del de Altsasu, dónde si cerraron otros servicios. También estuvieron con la persiana echada casi la totalidad de los comercios, establecimientos hosteleros y entidades financieras, con las calles desiertas al mediodía. El seguimiento también fue masivo en los centros educativos, con servicios mínimos pero apenas alumnado en las aulas. A modo de ejemplo, en el IES Altsasu faltó la totalidad del alumnado de a partir de 3º de ESO. En el colegio Zelandi acudieron 65 alumnos y alumnas mientras otros 362 se quedaron ayer en casa.

"Hemos sido capaces de llevar nuestras reivindicaciones a los centros de trabajo y a la calle. Hay un nuevo gobierno que necesita que traccionemos hacia la izquierda. Tenemos que defender nuestros trabajos, las pensiones y el sistema público", señaló Vierge.

MOVILIZACIONES Durante todo el día se sucedieron las movilizaciones por los diferentes pueblos. La más importante fue por la tarde en Altsasu, más de 3.000 personas según los organizadores. "Hoy ha sido un día histórico, hemos retomado el camino a la ofensiva", señalaron en el comunicado que representantes de las feministas y la juventud leyeron tras recorrer las principales calles de la villa. Fue el final de un largo día que comenzó con piquetes desde la madrugada. El más destacado fue en Ibarrea, dónde se cortó el acceso a este polígono de Altsasu, obligando a muchos trabajadores a dejar el coche en el barrio de la Estación. En este piquete se identificó a una persona. A otras dos en la Operación Barraskilo' la vuelta de la manifestación de Pamplona a 60 kilómetros por hora por la autopista.

Por la mañana hubo otra manifestación en Altsasu que reunió a casi un millar de personas. Asimismo, hubo otra en Etxarri, con unas 300 personas. además de concentraciones en Ziiordia, Bakaiku, Arbizu y Lakuntza así como una cadena humana en Irurtzun. Por otro lado, en Leitza se manifestaron ayer por la tarde más de 300 personas.