- Integrantes de los colectivos Amona, Oneka, Pentsionistak Martxan y Sasoia protagonizaron ayer una manifestación desde la plaza del Ayuntamiento de Pamplona hasta la sede del Parlamento foral en defensa de "unas pensiones mínimas de 1.080 euros y unos salarios mínimos de 1.200 euros", como reivindicaron. Además exigieron "unas residencias y servicios sociales públicos" después del sufrimiento que han padecido las personas mayores, y recordaron que muchas de ellas lamentablemente han fallecido. Una vez que se desplazaron hasta el paseo de Sarasate, representantes de estos colectivos registraron un escrito dirigido a todos los grupos parlamentarios sobre cómo "hay que responder a la realidad que se ha padecido en los últimos meses" por la pandemia del coronavirus. El acto de ayer comenzó a las 12.15 horas.