CGT, Steilas y ESK plantearon ayer reducir la jornada laboral para repartir el trabajo, porque “no sobran personas empleadas sino horas y consumismo”, destacaron en el manifiesto que pactaron para este 1 de Mayo, con el título Por unas vidas dignas, reparto de los trabajos y de la riqueza.

Estas tres centrales volvieron a salir el Día Internacional de los Trabajadores, como también pudieron protestar el año pasado a pesar de la pandemia, ya que acudieron a la plaza Recoletas después de que el Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN) revocara la prohibición de su acto por parte de la Delegación del Gobierno. A diferencia del año pasado, Solidari no se unió a la marcha de ayer; y tampoco lo hizo CNT, central que también suele adherirse a la manifestación con estos sindicatos.

Maura Rodrigo (CGT) e Íñigo Barace (Steilas) leyeron el comunicado en la plaza Recoletas de Pamplona, tras la manifestación con la que recorrieron varias calles del centro.

Estos sindicatos rechazaron “la nueva normalidad” porque ni siquiera aceptan la anterior. “Aquella era la del heteropatriarcado, del liberalismo y de un sistema que machaca y mata a las personas en sus puestos de trabajo”.

Resaltaron que censuran “el actual modelo social y de relaciones laborales” y defendieron la necesidad de cambiarlo “con voluntad política”. Aunque señalaron que si se carece de ella, habrá que “hacer que se tenga” para derogar todas las reformas laborales, y asegurar un sistema público de pensiones que acabe con la brecha de género.

También advirtieron de las ayudas para la recuperación procedentes de Europa y alertaron de que “buena parte de esos fondos vienen en forma de préstamos” y sometidos a “condiciones”. Por ello, criticaron “al que dice ser el gobierno más progresista de la historia” porque “no ha puesto fin al abuso de las horas extraordinarias” y por realizar reformas legislativas “para permitir que se explote y otros tengan que sobrevivir día a día”. Apuntaron que “mientras se han movilizado millones de euros para ayudar a las empresas, no ha habido reciprocidad y no se han convertido en puestos de trabajo”. Por todo ello, repitieron que “la exigencia del reparto es cada vez más evidente”.

CGT, Steilas y ESK matizaron que “no hay reconstrucción económica sin reconstrucción social, por lo que no hay salida de la crisis sin avanzar en los derechos de las personas”; para así lograr “vidas dignas que merezcan la pena”.

“Capitalismo salvaje”. CGT, Steilas y ESK calificaron el capitalismo de “salvaje”, porque hace “enfermar y mata a las personas en los puestos de trabajo”.“Por la reducción de la jornada laboral y la eliminación de las horas extra”. CGT repartió una hoja durante la manifestación en la que solicitaba “la reducción de la jornada laboral y la eliminación de las horas extra”. Esta central señaló que “el año pasado se realizaron casi 25 millones de horas extraordinarias en el Estado; y de ellas no se pagaron más de once millones”. Denunció que en el caso de las mujeres “más de la mitad de las horas extraordinarias no fueran retribuidas”.