Azkoyen es Peralta y Peralta es Azkoyen ha sido una de las frases más repetidas durante la celebración del 75ª aniversario del Grupo Azkoyen, o más bien del 75+1, como han recordado, puesto que esta efeméride la deberían haber conmemorado el año pasado. Y es que esta firma, que nació en 1945 en una bajera de la calle Dabán de la mano de Luis Troyas, se ha consolidado como una gran multinacional y se ha abierto paso en un mercado global e internacional gracias a la constante innovación; se trata de una empresa especializada en el diseño, fabricación y comercialización de soluciones tecnológicas para medios de pago electrónicos, sistemas de control y seguridad, soluciones mecatrónicas y máquinas expendedoras.

La actual sede de la firma peraltesa, que ha sido ampliada hasta en cuatro ocasiones, ha acogido por la mañana una breve visita guiada; los allí presentes han conocido los entresijos de la planta y han visto, en un pequeño museo, los primeros aparatos que elaboró Azkoyen; todas las miradas se han centrado en la máquina expendedora de gasolina para mecheros de 1954 y en las que ofrecían gominolas y chicles para acabar en las de café y tabaco.

Celebración

El acto oficial ha tenido lugar en la casa de cultura y el primero en dirigirse a los allí presentes ha sido Juan José Suárez, presidente de Azkoyen, que ha hecho una pequeña cronología de los hitos que ha ido superando la firma para llegar hasta la actualidad “con un único objetivo: ofrecer productos y servicios automatizados pensados para acercar experiencias únicas a las personas en su día a día”.

Él mismo les ha entregado un obsequio a las tres hijas del fundador Troyas; Karmele, Anne y Asunción que, visiblemente emocionadas, han agradecido “el compromiso y el trabajo de todos los trabajadores”.

Eduardo Unzu, CEO de la empresa, ha calificado de “equipazo” a las personas que han formado parte y que lo hacen aún hoy en día del Grupo Azkoyen y ha asegurado que, aunque 2020 fue un año “duro, muy malo”, supieron renovarse y tener miras de futuro y “gracias al talento y compromiso de todos sacamos una tecnología que es diferencial en el mercado”. De hecho, aseveró que este segundo trimestre de 2021 en cuanto al volumen de ventas están casi en números de 2019.

Además, y de cara al futuro, se ha mostrado optimista y ha afirmado que tendrán que mantener la capacidad de innovación, no olvidar al cliente, apostar por la internacionalización y, todo ello, sin olvidar el factor humano, “que todos sigamos con el mismo compromiso y que sintamos la camiseta de Azkoyen como propia”.

Eso sí, en cuanto a la posibilidad de irse de Peralta, lo ha dejado claro: “Azkoyen es una multinacional con raíces. Irse no es una opción, nunca ha estado sobre la mesa. Crecemos pero con el centro de dirección en Navarra”.

Por otro lado, el alcalde Juan Carlos Castillo ha reconocido “la gran aportación que Azkoyen le ha hecho al pueblo a nivel industrial, económico y tecnológico. Hay muchos retos de futuro y sabéis que vais a contar con el apoyo de todo el pueblo y del Ayuntamiento para hacerlo”.

Y para terminar, Juan Jesús Alberdi, director general de las divisiones de Coffee & Vending, Systems y Coffee & VendingSystemsPayment Technologies, ha agradecido la labor de los proveedores: “No se trata de un partenariado mercenario sino de un partenariado total”. Por este motivo, y por “su apoyo, flexibilidad, compromiso, profesionalidad y calidad” han reconocido a siete de estas empresas: Ferosal, Tasubinsa, Electrónica Selco, Plásticos Xima, Cableados Asje, Bobinados Osés y Electrónica Falcón.

Una vida en azkoyen

Para terminar el acto, que ha estado amenizado por la compañía de teatro Jamming, han homenajeado a 13 trabajadores que han pasado “toda una vida en Azkoyen”: Julio Aranaz (51 años), Santiago Irigaray, Mª Esther Bermejo y José Ignacio Orduña (50 años), José Félix Pérez y Luis Redín (47 años), Mª Pilar Ciordia y Mª Isabel Roldán (46 años), Julio Martínez, Mª Josefa Irigaray, Mª Carmen Ezpeleta (45 años), y Mª Ángeles García y Dolores Barco (44 años).