La huelga de la plantilla de la firma J.Córdoba, adjudicataria de la limpieza de las oficinas de Correos, parece que llega a su fin. Después de más de 70 días de paro indefinido en defensa de cobrar sus salarios, una nueva empresa se va a encargar de este servicio a partir de la próxima semana, según ha podido saber este periódico.

Esta compañía actuaría de puente hasta que Correos no complete la licitación pública y asigne este servicio a otra empresa.

Desde el 28 de agosto

Las asalariadas de J.Córdoba iniciaron una huelga el pasado 28 de agosto y dejaron de limpiar los centros de Correos en Navarra. En este proceso, la sociedad pública rescindió el contrato a la actual adjudicataria, y ahora otra organización va a asumir esta actividad de forma provisional, según han indicado estas fuentes. Las 53 empleadas serán subrogadas por la nueva empresa.

En un principio esta compañía se haría cargo de la limpieza de todas las zonas y lotes de Correos que tenía J.Córdoba en diferentes comunidades, como en Navarra y Gipuzkoa. De esta forma, faltarían unos flecos para culminar esta operación, según han adelantado estas fuentes.

Apoyo sindical

Esta solución pondría fin a una huelga que se ha extendido durante más de dos meses, en los que las empleadas han luchado siempre por sus condiciones laborales. Todas ellas han estado apoyadas por los sindicatos mayoritarios en Navarra, UGT, CCOO, ELA y LAB. En un primer momento, se concentraban los lunes y los jueves enfrente de la sede de Correos en el paseo Sarasate en Pamplona, y desde hace unas semanas acotaron las protestas a los jueves.

La plantilla de Correos en Navarra ha padecido las consecuencias de este paro, ya que sus centros han acumulado suciedad durante estas jornadas.

Estos trabajadores y trabajadoras han respaldado las reivindicaciones de las limpiadoras, y en todo momento han pedido a Correos que resolviera esta situación con celeridad. Al mismo tiempo, Inspección de Trabajo emitió un informe a finales de octubre, previa denuncia de LAB de Correos, para que la entidad pública aplicara las medidas necesarias para garantizar las condiciones higiénicas de la plantilla a la hora de desarrollar sus actividades.

Parte de estos empleados han decidido acudir con mascarilla a su puesto de trabajo para evitar el hedor que se respira en el interior de estos espacios. Incluso, algunos baños se han tenido que precintar, y los afectados se desplazan a bares cercanos para utilizar los aseos.

Finalmente, la lucha de estas limpiadoras ha propiciado que Correos rescinda el contrato a la empresa adjudicataria ante los incumplimientos laborales denunciados por ellas.