La Unión Europea (UE) adoptó este lunes las nuevas normas sobre control pesquero, que obligarán a registrar todas las capturas de manera digital, incluidas las de la pesca recreativa y obligará a los buques a ir equipados con sistemas de seguimiento.

"El reglamento que adoptamos hoy garantizará que nuestro sistema de control pesquero se mantenga actualizado con los últimos avances tecnológicos para garantizar que podamos prevenir eficazmente la sobrepesca", dijo en un comunicado el ministro en funciones de Agricultura, Pesca y Alimentación de España, Luis Planas, cuyo país ostenta hasta el próximo 31 de diciembre la presidencia rotatoria del Consejo de la UE.

Planas indicó que esto "redundará en beneficio del medio ambiente y, en última instancia, también beneficiará a las comunidades pesqueras y ayudará a garantizar la sostenibilidad social y económica del sector".

Cerca del 70 % de las normas existentes para el control de los buques pesqueros serán actualizadas con el reglamento adoptado.

Entre los principales cambios introducidos por la nueva legislación figuran los sistemas de seguimiento de buques y registro electrónico de capturas.

Todos los buques pesqueros serán en adelante rastreados a través de sistemas de control y todas las capturas deberán registrarse por medios electrónicos.

En el caso de determinados buques de pesca costera de menos de 9 metros de eslora, se podrán conceder exenciones al requisito de control hasta el 31 de diciembre de 2029.

Por otra parte, se hará un seguimiento electrónico remoto en el caso de buques más grandes para garantizar que las capturas no deseadas no se descarten en el mar en violación de la "obligación de desembarque", sino que todas se lleven a tierra.

En cuanto a la pesca recreativa, las nuevas disposiciones establecen que los pescadores recreativos deberán registrar e informar de sus capturas a través de un sistema electrónico.

En un principio se cubrirá un número limitado de especies pero el número podrá aumentar según el asesoramiento científico. Por otra parte, la nueva normativa incluye la revisión del sistema de sanciones.

De esa manera, se establece una lista completa de infracciones graves de las normas de la política pesquera común y los Estados miembros deberán garantizar que los responsables queden sujetos a sanciones administrativas "efectivas, proporcionadas y disuasorias". Además, o como alternativa, se podrán utilizar sanciones penales.

Por último, se prevé una mejora de la trazabilidad digital en toda la cadena de suministro para mejorar el rastreo tanto de los productos frescos como de la acuicultura.

En el caso de los productos transformados, esto se hará tras un estudio de la Comisión sobre las soluciones disponibles y tras un período de transición de cinco años.

Por otra parte, se introducirán nuevas reglas sobre el margen de tolerancia (o error) al estimar las capturas para evitar declaraciones erróneas.

Como norma general, el margen de tolerancia se mantendrá como hasta ahora en el 10 % por especie con carácter general, aunque será del 20 % para la pesca de pequeña escala y para todas aquellas especies capturadas cuyo peso en total no exceda los 100 kilogramos.

Se aplicarán derogaciones en el caso de pequeños pelágicos, pesca industrial y atún tropical, en particular si las capturas se desembarcan en puertos incluidos en una lista donde deben garantizarse condiciones especiales de desembarque y pesaje.

Por último, algunos buques de mayor tamaño estarán equipados con un dispositivo de medición de la potencia motriz, para garantizar que su capacidad pesquera se mantenga dentro de los límites establecidos en la Política Pesquera Común.