El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones se reúne este lunes con representantes de organizaciones de autónomos para definir los detalles del proceso de regularización de las cotizaciones de 2023, tras la implementación del sistema de cotización por ingresos reales.
Este mecanismo, que entró en vigor el año pasado y afecta a más de 3,6 millones de trabajadores por cuenta propia, ha supuesto un reto tanto para la Seguridad Social como para los trabajadores autónomos, dado que introduce una forma dinámica de ajustar las cotizaciones a los ingresos reales declarados por los trabajadores.
La novedad de este sistema radica en la posibilidad de que los autónomos modifiquen sus bases de cotización cada dos meses, adaptando así su contribución a sus fluctuaciones de ingresos a lo largo del año. Sin embargo, el ajuste definitivo se realiza a través de un cruce de datos entre la Agencia Tributaria y la Tesorería de la Seguridad Social, lo que podría generar tanto devoluciones como pagos adicionales, dependiendo de si la cotización adelantada fue superior o inferior a los ingresos netos reportados al final del año.
El nuevo sistema de cotización ha traído consigo tanto ventajas como incertidumbres para los autónomos. Por un lado, la flexibilidad permite que uno de cada dos trabajadores por cuenta propia pague una cuota inferior a la que venía abonando. Por otro, un 25% de los autónomos podría enfrentarse a un incremento en sus cotizaciones, especialmente aquellos con mayores ingresos. Este sistema de ajuste no se verá completamente implementado hasta 2032, lo que da margen a un periodo de transición en el que los tramos y cuotas seguirán ajustándose de acuerdo con los rendimientos netos.
Cuotas para 2024 y 2025
En concreto, el sistema consta de 15 tramos de cuotas que en 2023 oscilaron entre los 230 euros hasta los 500 euros y que en 2024 lo han hecho desde los 225 a los 530 euros. En 2025, las cuotas irán desde los 200 a los 590 euros mensuales. De cara a 2026, los interlocutores y el Gobierno central tendrán que pactar los tramos para los próximos años, hasta 2032.
Con esta regularización, se cierra el primer ejercicio bajo el sistema de ingresos reales, y la reunión de este lunes será clave para despejar dudas y aportar mayor claridad a los autónomos que, en su mayoría, han tenido que enfrentarse a una declaración de la renta obligatoria este año, independientemente del tiempo que hayan estado dados de alta en 2023.
La ministra Elma Saiz subrayó la importancia de este proceso para ofrecer “seguridad jurídica” y adaptar el sistema a las necesidades de este colectivo. “Habrá casos en los que haya unos autónomos que sus ingresos sean superiores a esa base de cotización y habrá que hacer algún ajuste y también a la inversa. Pero lo importante es dar certidumbre y seguridad jurídica a un colectivo tan importante por el que trabajamos día a día también en el ámbito del Ministerio”.
El encuentro de hoy será, por tanto, clave para explicar en detalle el proceso y los plazos a seguir, marcando el inicio de un nuevo capítulo en la cotización de los trabajadores autónomos en el Estado español.
Cuota de solidaridad
Sumar propone extender la cuota de solidaridad al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos, de forma que todos aquellos que obtengan rendimientos netos superiores a la base máxima de cotización abonen la cuota. Esta cuota se aprobó en marzo de este año y supone una cotización adicional para los ingresos que exceden la base máxima anual de cotización, establecida en 4.720,5 euros mensuales para el año 2024. La cuota empezará a aplicarse a partir de 2025.