Jesús Santos ha llegado puntual este miércoles a la sala de prensa de UGT en la avenida Zaragoza en Pamplona. En muchas ocasiones se ha sentado delante del micrófono para defender la postura de su sindicato en infinidad de temas. Pero la rueda de prensa de este 12 de febrero ha sido la de su despedida ante los medios de comunicación.
"Honradamente creo que he concluido el trabajo que se me encomendó de defender a la clase trabajadora y de reforzar el sindicato tras un periodo de crisis internas", ha detallado.
Santos, que en abril cumplirá 67 años, ha señalado que es el momento de "dar un pasado a un lado" para que recojan el testigo otras personas que lo asumirán seguramente como él, con "la máxima responsabilidad". En este caso Lorenzo Ríos, actual secretario general de la Federación de Industria, Construcción y Agro (FICA) en la Comunidad Foral.
De Madrid a Pamplona
Este sindicalista, natural de Cabanillas y trabajador de la CHE, ha recordado que en 2006 -año en que se produce la salida de Juan Antonio Cabrero como secretario general por tensiones internas- él se encontraba en Madrid y desde UGT le llamaron para que se incorporara a la estructura en la Comunidad Foral.
Santos ha relatado que formó parte de la ejecutiva de Juan Goyen (2006-2014) y de Javier Lecumberri (2014-2016), secretarios generales que tampoco cerraron como hubieran querido su etapa al frente de UGT en Navarra. "La primera fuerza sindical de Navarra no podía estar en eterna crisis y dándose de ostias todos los días, eso no lo podía entender nadie", ha manifestado.
Durante varias fases de su intervención, la voz de Santos se ha entrecortado por la emoción.
La supresión de los convenios
Así que hace nueve años adoptó el compromiso de trabajar por resolver esas tiranteces y también afrontó la difícil misión de reestructurar UGT tras suprimir el Gobierno de Uxue Barkos los convenios. Su desaparición provocó "recortes draconianos: cien despidos, cierre de sedes y disminución de servicios".
Santos ha relatado que lo fácil hubiera sido abordar esos ajustes y luego marcharse. "Pero nos quedamos porque había que resolver esta complicada situación, dejar el sindicato en buenas condiciones y, además, mantenerse como primera fuerza".
Gracias Marisol
En su discurso ha agradecido la labor de todas las personas del sindicato, pero en especial la de Marisol Vicente, secretaria de Acción Sindical, Social e Igualdad. "Siempre ha estado conmigo", ha resaltado, con lágrimas en los ojos. Ha interrumpido su intervención durante unos segundos, y Marisol que estaba en la sala, se ha levantado para agradecerle su gesto con un abrazo. En los últimos 20 años ambos han trabajado juntos en UGT y ambos se jubilan.
15.000 afiliados y afiliadas
Santos ha defendido su forma de hacer sindicalismo con la concertación y diálogo social, "refrendadas por la clase trabajadora al ser UGT el primer sindicato en número de delegados y delegadas". Actualmente, 15.000 personas están afiliadas a UGT en la Comunidad.
En febrero va a finalizar su etapa como secretario general, aunque prevé que todavía le dé tiempo a firmar el sexto Plan de Empleo. Así que esa rúbrica tendrá que plasmarse antes del viernes 21 de febrero.
Santos se marcha satisfecho de dejar a su sindicato como primera fuerza y con solidez interna. "La clase trabajadora confía en UGT y nos tiene como referencia", ha concluido. Sin embargo, también ha advertido que nos vienen años difíciles por toda la revolución geopolítica.