El consejero de Cohesión Territorial del Gobierno de Navarra, Óscar Chivite, y el presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro (Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico), Carlos Arrazola, se han reunido en Zaragoza con el objetivo de analizar y poner en común los avances en la tramitación de la actualización del Plan Foral de Regadíos. Se trata de un instrumento imprescindible para abordar la futura modernización de las infraestructuras existentes de riegos de la Comunidad Foral de Navarra.
Este plan incluye el desarrollo de las obras de la Segunda Fase del Canal de Navarra “de modo que los regadíos en la Ribera de Navarra sean una realidad lo antes posible”, ha afirmado el consejero Chivite.
El encuentro
En el encuentro han participado también el responsable de Riegos de Navarra y subdirector de la sociedad Pública INTIA, Joaquín Puig, el director técnico de la CHE, Ramón Lúquez, y el jefe de la Oficina de Planificación Hidrológica, Miguel García Vera. Esta reunión se inscribe en el trabajo continuo del Departamento de Cohesión Territorial para agilizar las infraestructuras de riego en Navarra, “fuente de riqueza, respeto medioambiental y necesario para el desarrollo de la agroindustria de la Comunidad Foral de Navarra y en especial para la zona de la Ribera”, ha precisado Óscar Chivite. Por su parte, desde la CHE, Carlos Arrazola ha recordado que el cambio climático “nos obliga a todos a seguir el camino de la garantía de recurso para no frustrar las expectativas de los usuarios, y en este caso de las y los navarros”.
En la misma línea de entendimiento con la CHE, el consejero de Cohesión Territorial ha insistido en la importancia de hacer un uso más eficiente de los recursos hídricos de la Comunidad Foral de Navarra tanto en abastecimiento como en riego. En este sentido, ha remarcado que la comunicación con la CHE es constante para “adaptarnos a una realidad en la que no podemos olvidar el cambio climático, pero tampoco los avances conseguidos con la modernización y digitalización de las infraestructuras hidráulicas que permiten un uso más racional de los recursos”.
El presidente Arrazola ha valorado positivamente el Plan de Regadíos y Canal de Navarra, al alinearse con los principios de sostenibilidad y de garantía de recurso que persiguen también desde la Confederación y que están reflejados en el Plan Hidrológico del Ebro.
Ambas instituciones han acordado seguir trabajando de forma coordinada durante los trabajos preparatorios del nuevo Plan Hidrológico para dar más concreción a estos objetivos comunes