La plantilla de Glovo en Pamplona ha secundado esta tarde la primera jornada de paros parciales que ha convocado el comité para denunciar "los atropellos laborales" de la empresa. Una veintena de trabajadores y trabajadoras se han concentrado enfrente del Parlamento foral para gritar alto y claro que no son "esclavos" y que no quieren ser "explotados", porque los riders están organizados.
El comité de Glovo en Pamplona, compuesto por ocho delegados de CCOO y uno de ELA, ha registrado paros parciales para este viernes 24, para el sábado 25, desde las 21.00 horas; y el domingo 26, de 12.00 a 15.00 horas. "Hemos elegido los horarios de máxima actividad productiva para reclamar condiciones laborales dignas", han indicado fuentes sindicales.
Además, la parte social quiere organizar asambleas con las personas trabajadoras para escucharles y para que democráticamente decidan si van a una huelga general.
Las reivindicaciones
La representación sindical, liderada por CCOO, reclama el "pago correcto de las nóminas, la aplicación de un convenio colectivo actualizado o la no absorción de complementos y pluses".
Exigen salarios "que superen el SMI". Por otro lado, la plantilla critica la "actitud abusiva de la empresa con la plantilla, con sanciones injustas y despidos arbitrarios" y que "no se respeta el derecho al descanso".
El pasado miércoles, hubo una rueda de prensa de la parte social en la que anunciaron estas movilizaciones. Así lo dieron a conocer Pablo Díaz, presidente del comité, y la secretaria general de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO Navarra, Lucía Sesma.
Bajas que no se reconocen
Según Díaz, recoge Europa Press, hay un "malestar bastante general" entre la plantilla ya que "los atropellos" por parte de la empresa "han abarcado desde descuentos erróneos en el mes", o "bajas laborales que no se reconocen y que tampoco son pagadas".
Además, "todavía hay personas que están contratadas sin estar dados de alta en la Seguridad Social", o "con porcentaje de cotizaciones que están mal". "Tenemos personas que están trabajando sin conocer ni siquiera su contrato de trabajo. Tenemos asignación de horarios excesivos de 10, 8, 9 horas, 11 horas por errores del propio algoritmo, en donde no se le reconoce al repartidor un descanso de 15 minutos", ha manifestado.
Díaz ha criticado también una "mala aplicación del convenio". "Este comité de empresa no está de acuerdo con un convenio de 2006 porque no es representativo, pero aún así la empresa no lo cumple", ha dicho, tras señalar que "no están incluyendo los kilómetros que son necesarios para el cálculo" de la medida "en la cual se valora el rendimiento del rider, y esto incide directamente en sus ganancias".
"Usamos nuestros propios vehículos"
"A día de hoy aún estamos utilizando nuestros propios vehículos y este factor es importantísimo porque te permitiría superar el SMI, poder optar a un bono de peligrosidad, que es necesario porque trabajamos con moto, trabajamos con monopatín, estamos en la calle con lluvia en condiciones de peligrosidad bastante importantes, y a día de hoy los trabajadores no tienen esto reconocido", ha reivindicado.
Ha continuado Díaz que "como comité de empresa hemos sido muy firmes con ello, no vamos a ceder ante nuestras demandas, estamos bien fuertes ahora mismo en la calle, la plantilla está decidida y no vamos a parar".
"El mensaje desde el comité de empresa es rotundo: a día de hoy son unos paros parciales, con intención de concentrarnos para hacer asambleas en donde podamos escuchar a la plantilla y democráticamente decidir si vamos a una huelga general", ha subrayado, tras advertir a la empresa de que si "no resuelven nuestra demanda, vamos a promover una huelga general que va a parar la operativa de Glovo de manera contundente en Pamplona".
"Lucha encarnizada"
Por su parte, Sesma ha relatado el proceso seguido hasta la constitución del comité de empresa, el primero en España, y la "lucha encarnizada" que ha supuesto. "Absolutamente todos los pasos que conlleva el acabar consiguiendo una representación sindical fueron impugnados, boicoteados y llevados a acciones judiciales por parte de la empresa", ha remarcado.
Según ha criticado, si los trabajadores, que eran "falsos autónomos, tenían una relación más o menos fluida con la empresa, ahora, siendo personas contratadas de gestión directa han llegado a no tener sus condiciones laborales bien realizadas por parte de la empresa". El hecho de que "no se cumplan sus condiciones laborales" ha generado un "malestar" que les ha llevado a convocar estos paros parciales, y a plantearse el "establecer unas medidas de acción de cara a una futura huelga general muchísimo más masiva", algo que se decidirá en las asambleas con los trabajadores.
"Cambio en el trato"
En definitiva, los trabajadores "reclaman un cambio en el trato por parte de la compañía, un convenio actualizado y pagos conforme a la normativa" ante una "situación de precariedad y de abuso laboral".