El Consejo de la Producción Agraria Ecológica de Navarra (CPAEN/NNPEK) ha entregado los Premios CPAEN/NNPEK 2025 en sus dos categorías: Toda una vida dedicada a la agricultura ecológica y Entidad Colaboradora. En esta ocasión, los galardones han recaído sobre Pan de Argiñariz/Argiñarizko Ogia y la editorial La Fertilidad de la Tierra.
La presidenta de CPAEN/NNPEK, María José Arrondo, y el director técnico, Enrique Arnedo, se desplazaron hasta Arguiñariz y Artaza, junto a integrantes del Consejo, para celebrar los reconocimientos en los propios lugares de trabajo de las personas premiadas, realizando visitas guiadas a sus instalaciones. Así, este año el Consejo sale al territorio y reconoce a las personas premiadas en sus pueblos, acercando la ceremonia a la realidad cotidiana de quienes hacen posible la producción ecológica y su divulgación.
Como obsequio, ambas entidades recibieron un cuadro conmemorativo realizado por Kattalin Barber (Herbaria), elaborado con flores, que simboliza el vínculo entre el cultivo local y el arte botánico.
Toda una vida dedicada a la agricultura ecológica
Como señaló María José Arrondo, Arguiñariz es merecedor del premio por ser un proyecto pionero en Navarra. Nació a inicios de los años 80 en el pueblo de Arguiñariz por iniciativa de un grupo de jóvenes con un proyecto de vida comunitaria que impulsó la rehabilitación del entorno rural y la puesta en marcha de un obrador de pan ecológico de masa madre, que se convirtió en la primera panadería ecológica inscrita en el Consejo en 1991.
Hoy continúa con una segunda generación que mantiene la exigencia artesana y el compromiso con la agricultura ecológica, entendida como una forma de vida que cuida el territorio y a las personas consumidoras.
El premio lo recogió Ángel Riera, pionero en el proyecto Arguiñariz, quien destacó que “el acompañamiento del Consejo ha sido clave para avanzar con rigor y cercanía en un oficio que requiere ciencia, sensibilidad y presencia en cada hornada”. Además, subrayó la vocación de Arguiñariz por seguir innovando en harinas y cereales en colaboración con el ecosistema público-técnico navarro.
Riera remarcó también que confía en que “CPAEN siga siendo una entidad pública, integrada en el organigrama de la Administración del Gobierno de Navarra; animo a todos a seguir reivindicando esa condición, frente a los reiterados intentos de privatizar la gestión de control”. Para terminar, agradeció a todas las personas, clientes, amigas y amigos “que nos han hecho posible llegar hasta aquí”.
Entidad colaboradora
Rosa Basaran y Fernando López son los responsables desde su fundación de la editorial La Fertilidad de la Tierra, un proyecto que se ha consolidado como una referencia estatal en la difusión de la agricultura ecológica y la agroecología.
Primero con su revista trimestral —premiada a nivel nacional— y, en la actualidad, con un catálogo cercano al centenar de títulos que promueven prácticas en huerta, frutales, permacultura, biodinámica, conocimiento de alimentos y vida autosuficiente, reforzando el vínculo entre consumo, ecología, economía local y paisaje.
En palabras de María José Arrondo, “llevan décadas sembrando conocimiento útil y riguroso para transformar la manera en que producimos y consumimos».
En su discurso de agradecimiento, Fernando López afirmó que “desde que nos implicamos en el sector de agricultura ecológica, hace más de 30 años, sin duda se ha avanzado mucho. Es un sector con muchas fortalezas, pero todavía ocupamos un espacio pequeño en la sociedad y la organización y el apoyo mutuo son claves. Consumir alimentos ecológicos de nuestros compañeros y vecinos son gestos de coherencia que ayudan a avanzar y crear comunidad”.
Con estos reconocimientos, CPAEN/NNPEK reafirma su compromiso con una agricultura ecológica que cuida el territorio, impulsa economías locales y garantiza alimentos sanos y de calidad.
La trayectoria de Arguiñariz y la labor divulgativa de La Fertilidad de la Tierra son ejemplo de cómo el conocimiento, la cooperación y la coherencia cotidiana transforman nuestro modelo alimentario.
El Consejo agradece la implicación de todas las personas y entidades que lo hacen posible e invita a la ciudadanía a seguir apoyando el producto ecológico navarro y a quienes lo producen y difunden. Porque cada elección en la compra y en la mesa es también una apuesta por un futuro más justo, saludable y sostenible para Navarra.
 
        
     
                 
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