Talleres Franfer, ubicada en San Adrián, es una de esas empresas que crece al calor de la industria agroalimentaria que vertebra la mitad sur de la Comunidad Foral. Sigue siendo una firma pequeña, con 28 trabajadores en nómina, pero quiere crecer y está preparando ya el relevo, con Alba Fernández Nieto como representante, junto a su hermano, de la tercera generación. “Porque este proyecto, en realidad, lo inició mi abuelo”.

Posteriormente fueron su padre y su tío quienes dieron forma a la empresa, tal y como es actualmente. Una firma que crece “poco a poco” y que, tal y como cuenta Alba, graduada en Administración, “fabrica a medida maquinaria para la industria agroalimentaria”. “Es una de nuestras fortalezas, transformamos en maquinaria las necesidades e ideas de nuestros clientes”. Un proyecto vivo, tangible, anclado en un territorio donde se genera actividad empresarial con un bien como la alimentación y donde conviven la materia prima y el talento humano.

¿Cuándo comenzó a trabajar en la empresa?

–Empecé en 2015, en un momento en que se necesitaba personal en el departamento de administración. Yo estaba trabajando en otra empresa, pero me ofrecieron la posibilidad de empezar en la empresa familiar y no tuve dudas. Junto con mi hermano siempre hemos tenido claro que queríamos continuar con lo que un día empezaron mi padre y mi tío.

Ha tenido alguna vez dudas de continuar con la empresa?

–No, dudas no he tenido. Pero siempre hay incertidumbre y creo que la mayor es saber si serás capaz de hacerlo bien. Es la empresa familiar, conoces el esfuerzo que hay detrás de tantos años de trabajo y tú sola te pones el reto de no fallar.

¿Qué cree que puede aportar a la empresa?

–Cercanía, compromiso, nuevas ideas, nuevas formas de trabajo y sobre todo ilusión y ganas, que espero trasmitir para que a todos les guste su trabajo.

¿Qué cualidades cree que debe tener el líder de una organización?

–Capacidad de comunicar, de escuchar y, sobre todo, debe actuar desde el ejemplo. 

Cómo visualiza la empresas dentro de, por ejemplo, una década. 

–Me gustaría verla como un referente en la fabricación de maquinaria agroalimentaria y siendo ejemplo como equipo de trabajo y destacando la atención directa y personalizada que nos caracteriza con nuestros clientes.

¿Qué le diría a quien tiene dudas de si seguir adelante en un proyecto empresarial?

–Que lo intenten, hay días muy duros, pero trabajar con ilusión en el proyecto que has elegido es muy gratificante y merece la pena intentarlo.